Pasta de dientes, chocolate, desodorante, detergente, cacahuetes, atún… Los centros comerciales de Estados Unidos tratan de impedir que los productos de primera necesidad sean saqueados por una multitud que asalta las estanterías.
El gigante minorista Walmart, su competidor Target, las cadenas de farmacias CVS, Walgreens, la cadena de bricolaje Home Depot y el distribuidor de calzado deportivo Foot Locker se encuentran entre las numerosas marcas comerciales afectadas por el aumento de los expolios.
“Durante los primeros cinco meses del año, nuestras tiendas vieron un aumento del 120 por cien en los robos acompañados de violencia o amenazas de violencia”, denunció Brian Cornell, director de Target. “Nuestros equipos siguen enfrentándose a una cantidad inaceptable de robos en tiendas y delincuencia organizada en bandas”, añade.
Los tipos de interés saltaron de casi cero al 5,50 por cien en dieciocho meses (un máximo en veintidós años) para frenar la inflación, que alcanzó el 9,1 por cien en junio del año pasado, un récord en cuatro décadas, lo que ha llevado el hambre a muchos estadounidenses, que no puden llegar a fin de mes.
“La pandemia ha provocado un aumento de los riesgos”. Para limitar el alcance de las expropiaciones, las estanterías suelen estar escasamente abastecidas, o incluso vacías.
Cada vez más tiendas instalan en ellas cerraduras y cadenas de candados en las neveras. También distribuyen botones de llamada para que los trabajadores abran los pasillos de los supermercados a los clientes.
Un hombre, con capucha y mascarilla sanitaria, abrió con un soplete la estantería de un Walgreens, en Queens, Nueva York, delante de los clientes y los trabajadores. Luego llenó una gran bolsa y se marchó del local.
Los centros comerciales piden a los trabajadores que no intervengan en caso de robo y que no llamen a la policía. Algunas cadenas están estudiando cerrar tiendas, como los supermercados Giant en Washington. «Es cada vez más difícil operar en estas condiciones», afirma un portavoz de la empresa.
Walgreens cerró cinco tiendas en San Francisco en 2021 a causa de los robos. Walmart ha cerrado cuatro en Chicago este año, oficialmente por falta de rentabilidad, señaló John Rainey, director financiero de la cadena. “No queremos que eso aumente porque podría generar precios más altos”.
Cada vez hay más saqueos relámpago: un grupo irrumpe en una tienda, se apodera de los artículos que tiene a su alcance y en muy pocos minutos huye a la carrera. El 12 de agosto en una tienda de la cadena Nordstrom en Los Ángeles, una treintena de enmascarados robaron artículos de lujo por valor de más de 300.000 dólares.