El gobierno australiano propone ir de puerta en puerta para realizar pruebas masivas de coronavirus

“Estamos preparados para hacer lo que hay que hacer”, dijo Daniel Andrews, Primer Ministro de Victoria, incluso ir “puerta por puerta” para realizar las pruebas obligatorias de coronavirus a los australianos.

Andrews hizo estos comentarios en una rueda de prensa mientras Australia continúa con su ridícula política de “covid cero”, que impone medidas draconianas de confinamiento con el pretexto de un puñado de “nuevos casos”.

“No estamos en un punto en el que tengamos que ir de puerta en puerta”, dijo Andrews. “No estamos en un punto en el que necesitemos que suburbios enteros salgan a examinarse. Si llegamos a ese punto, no dudaremos. Creo que hemos demostrado, de hecho sé que hemos demostrado que estamos preparados para hacer lo que hay que hacer, sea popular o no”, añadió.

Dado que en algunas partes del país los militares están imponiendo a la fuerza las medidas de confinamiento y cuarentena, cabe preguntarse cómo tratarán a quienes no quieran someterse a las pruebas.

Con sus argumentos ya no embaucan a nadie, y si dan el paso de imponer la obligatoriedad de las pruebas de coronavirus puerta a puerta, lo siguiente será la obligatoriedad de las vacunas puerta a puerta.

Andrews señaló que quienes se nieguen a ser vacunados serán discriminados y permanecerán indefinidamente sujetos a las normas de confinamiento de facto. “Es una conversación difícil de mantener con la gente ahora, en un tono casi amenazante, cuando la gente que quiere vacunarse no puede hacerlo porque no tenemos suficiente material. Pero llegará un momento en que creo que las restricciones se aplicarán a los que no se han vacunado, en lugar de que las restricciones se apliquen a todos nosotros”, dijo.

“Para entrar en un recinto, para asistir a un evento importante, para participar plenamente como cliente, como poseedor de una entrada, como consumidor, como espectador, como quieras verlo, estar vacunado significará que entras, y estar vacunado significará que no”, amenazó.

Australia ha impuesto uno de los confinamientos más brutales del mundo desarrollado, con la exigencia de llevar mascarilla al aire libre, lo que ha provocado innumerables detenciones y escenas impactantes como la de la semana pasada en Brisbane, donde un anciano sufrió un infarto tras ser acosado por la policía por no llevar mascarilla mientras hacía ejercicio al aire libre.

El gobierno también ha ordenado a los australianos que se mantengan alejados de sus nietos y que no entablen conversación entre ellos, aunque lleven mascarilla.

Las personas que publican informaciones críticas sobre el confinamiento en las redes pueden ser multadas con hasta 11.000 dólares en virtud de una nueva ley.

Mientras tanto, algunos australianos están siendo llevados a la fuerza a manicomios contra su voluntad si no están de acuerdo con las explicaciones oficiales sobre el coronavirus.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies

Descubre más desde mpr21

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo