La fiscalía belga ha abierto una investigación por los crímenes de guerra cometidos por un soldado de doble nacionalidad belga-israelí que luchaba en las filas del ejército israelí en la Franja de Gaza.
La investigación se centra en un miembro belga de una unidad de élite del ejército israelí que tambiénn incluye a otros con doble pasaporte. “Hemos abierto un caso sobre posibles crímenes de guerra”, dijo un portavoz de la fiscalía.
Se cree que el acusado, que no ha sido identificado, es un hombre de unos veinte años de Uccle, un barrio de Bruselas.
La investigación, abierta oficialmente el miércoles, se deriva del trabajo del periodista palestino Younis Tirawi. En octubre Tirawi acusó a una unidad de francotiradores israelí llamada “Refaim” (“Fantasmas” en hebreo), de “ejecuciones brutales de civiles desarmados”.
El ministro de Justicia belga, Paul Van Tigchelt, dijo el jueves que la investigación belga tenía como objetivo verificar la información publicada en la prensa. “Israel tiene derecho a defenderse, pero eso no lo exime de su obligación de respetar el derecho internacional humanitario”, dijo Van Tigchelt en el Parlamento.
La fiscalía belga se coordinará con el Tribunal Penal Internacional en La Haya, cuyo fiscal jefe solicitó la firma de una orden de detención para el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el ministro de Defensa, Yoav Gallant, por los crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad cometidos en la Franja de Gaza.
El fiscal del Tribunal Penal Internacional, Karim Khan, también solicitó órdenes de detención para los principales dirigentes de Hamás, Yahya Sinwar, Ismail Haniyeh y Mohammed Deif, aunque desde entonces los tres han sido asesinados.
Israel continúa una brutal ofensiva en la asediada Franja de Gaza tras la incursión de Hamas del 7 de octubre del pasado año. Desde entonces, más de 42.400 personas han muerto, principalmente mujeres y niños. Más de 99.000 han resultado heridas y hay más de 10.000 desaparecidos.
El ataque israelí ha desplazado a casi toda la población de Gaza bajo un bloqueo permanente que ha provocado una grave escasez de alimentos, agua potable y medicinas.
Además, el ejército israelí ha extendido la guerra a Líbano, con despiadados bombardeos contra la población civil, que ya han causado 2.500 muertos.
Israel también es objeto de un juicio por genocidio ante el Tribunal Internacional de Justicia por sus crímenes en Gaza.