Comandos británicos han ejecutado operaciones encubiertas de alto riesgo en Ucrania

Rusia carga las tintas contra Reino Unido con plena razón. El pasado mes octubre el Ministerio de Defensa ruso ya acusó a los comandos británicos de operaciones especiales tras el ataque con drones a la base naval de Sebastopol, en Crimea.

“La preparación de este acto terrorista y el entrenamiento del personal militar del 73 centro ucraniano de operaciones marítimas especiales fueron llevados a cabo por especialistas británicos con base en Ochakov, en la región ucraniana de Mykolayev”, afirmó Moscú, mientras que Londres también fue acusada de participar activamente en el sabotaje de los gasoductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2 unas semanas antes.

Los portavoces oficiales de Downing Street rechazaron las acusaciones rusas sin poner demasiado énfasis en los desmentidos. Se trata de otro caso de desinformación procedente del Kremlin. Nada nuevo.

Los comandos británicos de operaciones especiales, pertenecientes al Royal Marine Corps, que forma parte de la Royal Navy y del que también deriva el Special Boat Service, han sido desplegados en Ucrania en al menos dos ocasiones.

Esta vez no es desinformación rusa, sino una confesión del general Robert Magowan, que fue su comandante antes de ser destinado al Cuartel General de las Fuerzas Británicas en mayo de este año. Ya no intentan disimular.

“Ya hemos visto un atisbo del nuevo concepto de ‘Fuerza de Comandos’, que fructificó durante el horrible conflicto de Ucrania”, escribe el general Magowan en las páginas del Globe and Laurel, la revista oficial de los Royal Marines.

“En enero de este año, el comando 45 fue llamado, con muy poca antelación, desde Noruega”, donde se preparaba para participar en el ejercicio Cold Response 22, “para evacuar la embajada británica de Kiev a Polonia”, asegura el general. Después la unidad de Royal Marines regresó en abril para restablecer la presencia diplomática británica en la capital ucraniana, que ya no estaba amenazada por las fuerzas rusas, y para proporcionar protección.

Con sede en Arbroath, Escocia, el Comando 45 cuenta con unos 500 efectivos. Adscrito a la 3 Commando Brigade, lleva a cabo tareas operativas en todo el mundo, según confiesa la Royal Navy.

Durante estas dos fases, los comandos británicos “apoyaron otras operaciones discretas en un entorno extremadamente delicado y con un alto nivel de riesgo político y militar”, reveló el general Magowan.

Es la primera vez que el gobierno de Londres admite oficialmente que las tropas británicas han participado en misiones encubiertas en Ucrania, al menos aparte de proteger recintos diplomáticos o entrenar a soldados ucranianos.

En agosto, el Ministerio de Defensa reconoció que se había enviado personal militar británico a Ucrania “para apoyar la presencia diplomática del Reino Unido” y preparar el adiestramiento de las fuerzas ucranianas. “No tienen función de combate”, insistió. “Nos tomamos muy en serio la seguridad de nuestro personal y este despliegue se revisa constantemente”, añadió el Ministerio.

El general Magowan también reconoce que los Royal Marines “han participado intensamente en el adiestramiento de cientos de militares ucranianos durante todo el verano”.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies

Descubre más desde mpr21

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo