El gobierno de India va a derogar las tres leyes de reforma agraria que durante casi un año han desencadenado masivas protestas de los campesinos, dijo el viernes el primer ministro, Narendra Modi, que tras un año de movilizaciones se ha visto obligado a claudicar.
“Hemos decidido derogar las tres leyes agrícolas. Empezaremos el proceso constitucional para anular las tres leyes en la sesión parlamentaria que empieza a finales de mes”, dijo Modi en un discurso.
“Pido a todos los agricultores que participan en la protesta […] que vuelvan a sus casas, a sus seres queridos, granjas y familias”, añadió, pidiendo “comenzar de cero y avanzar”.
Desafiando las restricciones sanitarias, desde noviembre del año pasado miles de campesinos, muchos de ellos del estado norteño de Punjab, estaban acampados en los confines de la capital, Nueva Delhi, en lo que ha supuesto uno de los mayores desafíos al gobierno de Modi.
Casi dos tercios de los 1.300 millones de indios deben su subsistencia a la agricultura, un sector que siempre ha sido un campo de minas para la oligarquía dominante.
La reforma “negra” se aprobó en septiembre del año pasado para dejarar a los campesinos a merced de las grandes multinacionales agrarias.
Las protestas tomaron un cariz violento en enero, cuando un desfile de tractores en Nueva Delhi se transformó en una embestida que causó la muerte de un campesino y dejó heridos a cientos de policías.
El mes pasado, ocho personas murieron en disturbios en el estado de Uttar Pradesh, al norte de India.
Crónica de un año de luchas campesinas en India:
— La crisis de agricultura en India: monopolismo y control de los grandes mercados internacionales
— El campesinado se levanta contra el dominio monopolista de las grandes empresas agrarias de India
— 200 millones de trabajadores salieron a la huelga en India contra la política económica del gobierno
— Un muerto en las movilizaciones campesinas de India contra la política agraria del gobierno
— El campesinado ha bloqueado las carreteras estratégicas que recorren India