Eslovaquia quiere dejar de apoyar a Ucrania en la guerra

Más de la mitad de los eslovacos verían con buenos ojos una victoria militar rusa sobre Ucrania, según una encuesta de septiembre del año pasado. Sólo el 40 por cien de la población cree que Rusia es la principal responsable de la guerra en Ucrania, indica otro sondeo de Globsec.

La Presidenta de Eslovaquia, Susana Caputova, está preocupada porque en septiembre hay elecciones y puede perder su cargo, lo que pondría en apuros a la OTAN y la Unión Europea. Teme que su país siga el ejemplo de Hungría, por lo que ha recurrido a la demagogia de costumbre: la culpa es de los “partidos populistas” y la “desinformación rusa”.

Un vuelco electoral podría socavar el apoyo de Eslovaquia a Ucrania.

Uno de esos partidos políticos malditos es el Smer-SD, encabezado por el antiguo primer ministro Robert Fico, que aparece en la fotografía de portada. Al igual que el FPÖ en Austria, el Smer-SD encabeza las encuestas en Eslovaquia y ambos se oponen a apoyar militarmente a Ucrania en la actual guerra.

La popularidad del Smer-SD se debe a su postura en cuestiones sociales y a sus consignas “prorrusas” (o “antiucranianas”, según se mire). Califica a la actual Presidenta de “agente estadounidense” y se ha opuesto a la entrega de cazas MiG-29 a Ucrania.

Su fundador, Robert Fico, ha sido tres veces primer ministro. Dimitió en 2018 y ha prometido poner fin al apoyo militar de Eslovaquia a Kiev si resulta elegido. Al igual que Herbert Kickl en Austria, ha criticado el suministro de armas al país vecino y las sanciones impuestas a Moscú desde la anexión de Crimea en 2014, afirmando que estas medidas perjudican a la población rusa y no al Kremlin.

Fico acusa a Caputova de practicar una política “muy sucia” al acusar a sus adversarios políticos de difundir “desinformación rusa”. El Smer-SD también ha declarado que no quiere cambiar la política exterior de Eslovaquia. “Nuestro partido apoya plenamente la pertenencia de Eslovaquia a la UE y a la OTAN”, ha dicho Roth Nevedalova, una de sus dirigentes.

Nevedalova reconoce el derecho de los ucranianos a defenderse, exige un alto el fuego y un proceso de paz. “No podemos enviar ningún tipo de apoyo militar a Ucrania, simplemente porque en Eslovaquia no hay más material militar”.

Esta postura no tranquilizan a Bruselas, que califican de “desastre” la posible victoria de este partido en las próximas elecciones. El país se sumaría a la postura de Austria o, lo que es mucho peor, a la de Hungría.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies

Descubre más desde mpr21

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo