Un total de 621 personas han muerto de sobredosis de drogas este año en San Francisco, comparados con 173 muertes por coronavirus en la ciudad, según la Associated Press (1). El número de muertes por sobredosis de drogas ha cfrecido un 140 por ciento desde el año pasado.
Es mucho peor el remedio que la enfermedad. El confinamiento ha multiplicado las toxicomanías y con ellas ha multiplicado las sobredosis y las muertes. California ha promulgado las restricciones más duras de Estados Unidos y dicen que los “positivos” siguen aumentando. Un fracaso está conduciendo al otro.
Los CDC informan que con la pandemia las muertes por sobredosis se han acelerado (2). Una encuesta de YouGov muestra que ha recaído el 39 por ciento de los encuestados que se recuperaban de una adicción antes del confinamiento (3). Otros sondeos apuntan a un aumento en los índices de consumo de alcohol y drogas este año.
Un epidemiólogo de la Facultad de Medicina de Harvard, Martin Kulldorff, ha criticado el confinamiento desde el comienzo de la pandemia, advirtiendo que la coerción generalizada conduciría a graves “daños colaterales” para la salud pública y a un aumento de la mortalidad (4).
Este año los datos de mortalidad de Estados Unidos para personas entre 25 a 44 años de edad se deben en su mayoría a esos “daños colaterales” causados por los toques de queda y las restricciones, lo que confirma que, en efecto, el remedio es peor que la enfermedad.
Además del aumento del consumo de alcohol y drogas y de las muertes por sobredosis, este año también están aumentando los pensamientos e intentos de suicidio. El Washington Post asegura que la depresión y la ansiedad han aumentado con el confinamiento (5).
“El 40 por ciento de los norteamericanos tienen al menos un problema de salud mental o relacionado con las drogas. Pero los jóvenes han sido más afectados que cualquier otro grupo de edad”, informa el Washington Post. “Cuando los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades le preguntaron a los adultos jóvenes recientemente, si habían pensado en suicidarse en los últimos 30 días, 1 de cada 4 respondió que sí lo habían pensado”.
En Estados Unidos las fiestas de Año Nuevo han mostrado las dificultades para que millones de personas acepten las restricciones de buen grado. La mayoría ha optado por ignorar las advertencias de salud pública para evitar los viajes y las reuniones de vacaciones. El Wall Street Journal indica que se espera que casi 85 millones de estadounidenses viajen entre el 23 de diciembre y el 3 de enero, una disminución de poco menos del 30 por ciento con respecto al año pasado (6).
Un año después, la palabra que mejor resume la situación es hartazgo, consecuencia de la impresión de que hay cosas mucho peores que el peor de los virus.
(1) https://apnews.com/article/san-francisco-coronavirus-pandemic-a48a148efadbeaa1181148ea367c4d68
(2) https://www.cdc.gov/media/releases/2020/p1218-overdose-deaths-covid-19.html
(3) https://www.actiononaddiction.org.uk/media/464/summary-of-findings.pdf?1591598011
(4) https://www.newsweek.com/authors-anti-lockdown-great-barrington-declaration-suggest-covid-could-over-2-months-vaccine-1552913
(5) https://www.washingtonpost.com/health/2020/11/23/covid-pandemic-rise-suicides/
(6) https://www.wsj.com/articles/states-impose-strictest-covid-19-lockdowns-since-spring-11608719403