Cuba va a legalizar los pagos en criptomonedas dentro y fuera de la isla. Es una forma de eludir el embargo financiero impuesto por Estados Unidos.
Ya en julio de 2019 el Gobierno y el Banco Central anunciaron su intención de explorar un uso legalmente regulado de las criptodivisas, que circulan por la isla. Su uso está especialmente extendido a causa de las últimas sanciones de Estados Unidos, que privan a los cubanos del acceso a medios de pago internacionales, como las tarjetas de pago.
El 26 de agosto el gobierno cubano anunció en una resolución publicada en la Gaceta Oficial que reconocería las criptomonedas para los pagos en la isla. El Banco Central establecerá la regulación de estas monedas y determinará las condiciones para la concesión de licencias a los proveedores de servicios.
La resolución, que entrará en vigor el 15 de septiembre, regula “el uso de determinados activos virtuales en las transacciones comerciales, así como el otorgamiento de licencias a los proveedores” de estos servicios en “operaciones relacionadas con actividades financieras, cambiarias y de cobro o pago” dentro o fuera de territorio cubano.
El Banco Central puede autorizar el uso de criptomonedas “por razones de interés socioeconómico”.
Según estimaciones no oficiales, sólo unos 10.000 cubanos utilizan bitcoins -una de las criptodivisas más extendidas en el país- de una población de 11 millones.
Tras las restricciones de viaje impuestas con motivo de la pandemia y el endurecimiento del bloqueo económico por parte de Washington, las remesas individuales a Cuba son cada vez más difíciles, y muchos cubanos están recurriendo a las criptomonedas para enviar dinero a sus seres queridos en la isla.
Recientemente El Salvador anunció que reconocería legalmente el uso del bitcoin para atraer al país las remesas de los trabajadores emigrantes.