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| El asesinado Olof Palme |
El fiscal jefe de Suecia, Krister Petersson, se hará cargo de la investigación en febrero. Petersson confía en poder arrojar luz sobre los acontecimientos que rodean la muerte del primer ministro sueco.
Palme, que ocupó el cargo primer ministro en dos ocasiones, perteneció al Partido Socialdemócrata. El asesino huyó con el arma del crimen, dejándole tendido en el suelo sobre un charco de sangre.
Han transcurrido 30 años. Más de 10.000 personas fueron interrogadas y los archivos de la investigación ocupan 250 metros de estanterías. Hasta ahora, el único nombre ligado a la muerte de Palme ha sido el de Christer Petterson, un delincuente común, identificado como el autor de los hechos por la mujer de Palme y que, a pesar de haber sido declarado culpable del asesinato, fue absuelto de los cargos por falta de pruebas. Llegó a reconocer el asesinato, pero posteriormente se retractó. Murió en 2004.
Fue la CIA quien asesinó a Palme. En aquella época el patrón de la Casa Blanca era Reagan, aunque el asesinato se llevó a cabo sin su conocimiento. Los verdaderos instigadores fueron el vicepresidente Bush padre, antiguo director de la CIA, y el director de la central de espionaje, William Casey.
La Comisión Tower investigó los procedimientos de la Comisión Nacional de Seguridad, entonces involucrada en el caso Irán-Contra. Parece que ambos asuntos están relacionados, siendo el hilo conductor la empresa sueca Bofors, dedicada a la fabricación de armamento. La CIA utilizó a Bofors como intermediaria para hacer llegar armas a Irán, burlando el embargo trabado contra el régimen de Teherán, entonces envuelto en una larga guerra contra el Irak de Saddam Hussein.
Palme impidió que los suministros de armas continuaran.