“No tenemos ni idea de quién es esa gente”, dijo Trump en una conversación de contenido económico en el que admitió que tiene intención de conservar una parte al menos de ley de salud aprobada por Obama.
A lo largo de su campaña electoral Trump prometió que renunciaría a la pretensión de Estados Unidos de destituir al Presidente sirio Bashar Al-Assad y a la guerra, hasta el punto de aspirar a mejorar las relaciones con el actual gobierno de Damasco, así como con Moscú, constituyendo uno de los objetivos de su mandato la erradicación del Califato Islámico.
Durante la campaña Trump dijo que no le gustaba “en absoluto” Bashar Al-Assad, pero que había que apoyarle en su lucha contra el extremismo que había prosperado en Oriente Medio, sembrando el caos y la guerra civil.
Trump afirma que la destitución de Bashar Al-Assad no es una prioridad. Lo esencial es, por el contrario, “desembarazarse” del Califato Islámico y “Siria lleva una lucha contra el Califato Islámico”.
“Apoyamos a unos insurgentes contra Siria que no tenemos ni idea de quiénes son”, añade el nuevo Presidente, quien en su entrevista afirma también que un ataque contra Siria “llevará a un combate contra Rusia” porque ambos países mantienen una unión muy estrecha.
Para Trump la Guerra de Siria ha reforzado las posiciones de Irán en Oriente Medio, uno de los caballos de batalla del nuevo gobierno, consecuencia de las presiones israelíes. Durante su campaña electoral Trump anunció su oposición al acuerdo nuclear con Irán y llegó a decir que pretende lograr su anulación.
Trump indica que no va a continuar con la política actual del gobierno de Obama y el New York Times decía ayer que “probablemente” suspenderá la ayuda que Estados Unidos presta ahora a los yihadistas.
Ayer Putin y Trump conversaron telefónicamente por vez primera. El servicio de prensa del Kremlin ha asegurado que ambos se han comprometido a mejorar las relaciones entre ambos países en todos los terrenos, incluido el económico, por lo que es posible que se levante el actual bloqueo impuesto desde la Guerra del Donbas.
Por su parte, el domingo en una entrevista a la cadena de televisión NTV, el Presidente de la Duma, la Cámara Baja del Parlamento ruso, Viatcheslav Volodin, dijo que era optimista respecto a la mejora en las relaciones entre Estados Unidos y Rusia “si Trump cumple sus promesas”, lo que puede cambiar la situación por completo.