Un grupo de senadores y representantes de ambos partidos, republicanos y demócratas, escribió a Trump el 22 de febrero para celebrar su decisión de mantener un pequeño contingente de soldados en Siria como fuerza de estabilización.
Una copia de esa carta muestra que Trump destacó un párrafo sobre los objetivos de la prolongada presencia estadounidense en Siria. “Estoy de acuerdo al 100 por cien. Todo se está haciendo”, escribió Trump en la carta como respuesta, antes de añadir su firma.
El 21 de febrero la Casa Blanca anunció que Estados Unidos dejaría unos 200 soldados en Siria incluso después de la retirada del resto de las tropas estadounidenses. Al día siguiente Trump confirmó que una pequeña porción de las fuerzas estadounidenses permanecería en Siria con tropas de otros países.
Citando a un alto funcionario del gobierno, los medios de comunicación informaron posteriormente que el ejército estadounidense dejaría unos 400 soldados en dos regiones diferentes de Siria.
Según dicho funcionario, la mitad de esos soldados se unirían a la fuerza multinacional de 800 a 1.500 soldados que ha invadido el noreste de Siria para mantener una zona de amortiguación entre Turquía y las fuerzas kurdas respaldadas por Estados Unidos. Los 200 soldados restantes permanecerían en la base de Al-Tanf, cerca de la frontera de Siria con Irak y Jordania.
Después de proclamar su victoria sobre el Califato Islámico, Trump anunció en diciembre de 2018 la retirada de las tropas estadounidenses de Siria. Esta decisión llevó a la dimisión de James Mattis, entonces Secretario de Defensa de Estados Unidos.