Se trata de un informe con las grabaciones tomadas por la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense a funcionarios del gobierno de Turquía, encabezado por el entonces primer ministro Recep Tayyip Erdogan, durante una reunión celebrada en 2014 en el Ministerio de Asuntos Exteriores de Ankara.
Entre los participantes estaban el actual primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, y el vicecanciller Feridun Sinirlioglu, el jefe de la Organización Nacional de Inteligencia de Turquía (MIT), Hakan Fidan, y el jefe adjunto del Estado Mayor, general Yaser Guler.
Las grabaciones del espionaje estadeounidense ponen al descubierto que el gobierno turco discutió una maniobra para invadir el territorio sirio. El plan simulaba un falso ataque contra la capital siria en el que participaría el Califato Islámico para así justificar una posterior intervención de las tropas turcas en el país vecino.
No es la primera vez que salen a la luz revelaciones de reuniones secretas entre funcionarios turcos sobre la guerra en Siria. El 27 de marzo del pasado año se divulgaron a través de Youtube fragmentos de varias grabaciones de una reunión del equipo de seguridad nacional de Turquía.
Desde finales del mes pasado más de 12.000 soldados turcos y varias unidades de tanques están desplegadas en la frontera que divide a ambos países, bajo la excusa de una creciente actividad de las milicias kurdo-sirias enfrentadas al Califato Islámico.
A través de la frontera turca, miles de mercenarios yihadistas de diferentes países del mundo se infiltran en Siria con el propósito de incorporarse a las milicias terroristas que luchan contra el gobierno de Damasco.