El 20 de enero el Califato Islámico atacó la prisión de Ghweran, en Hasakah, al noreste de Siria, controlada por las milicias kurdas las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), que desempeñan el papel de apéndices del ejército estadounidense en la región.
Los atacantes detonaron un coche bomba en la puerta norte de la prisión. Avanzaron en tres direcciones con más de 100 miembros y otros 100 presos del Califato Islámico iniciaron un motín dentro de la prisión. Su número aumentó rápidamente después de que tomaran el control del depósito de armas dentro de la prisión.
La Asayish, la policía kurda, anunció un toque de queda de una semana en Hasaka. Todos los puntos de entrada fueron sido bloqueados para impedir la entrada de refuerzos del Califato Islámico. A pesar del despliegue de controles de seguridad en toda la ciudad, unos 800 prisioneros lograron escapar, según Amaq, el medio de comunicación del Califato Islámico.
Seis días después, tras los combates más intensos desde la derrota del Califato Islámico en 2019, las FDS anunciaron la rendición de los miembros del Califato Islámico que huían y afirmaron haber recuperado el control total de la prisión y sus alrededores.
Más de 200 personas de ambos bandos murieron en el tiroteo. Los violentos enfrentamientos provocaron el desplazamiento de miles de civiles y grandes daños en las infraestructuras, atribuidos a las incursiones estadounidenses dirigidas a los barrios de Al-Zohour y Ghweran.
Los detalles del asalto y la fuga de prisioneros no están claros aunue, en cualquier caso, pone de manifiesto una estrecha coordinación entre los grupos del Califato Islámico dentro y fuera de la prisión.
Los kurdos hacen grandes negocios en las cárceles
Los carceleros kurdos facilitaron la incautación del depósito de armas por parte del los presos del Califato Islámico.
La cárcel es uno de los negocios más sucios con los que se financian los kurdos. En las nueve zonas controladas por las FDS y Estados Unidos hay un gran número de prisiones, que son objetivos potenciales de ataques parecidos, especialmente la prisión de Kamba Al-Bulgar, al este de Al-Shaddadi, en las afueras de Hasaka, que alberga a 5.000 miembros del Califato Islámico.
Miembros del Califato Islámico han llegado a pagar a las FDS hasta 8.000 dólares para ser liberados, algo que no sería posible sin la aprobación de la CIA (1).
La prisión es la mayor agrupación de fuerzas que tiene el Califato Islámico del mundo. Alberga a unos 3.500 miembros de más de 50 nacionalidades diferentes. Está enclavada en una de las zonas más fortificadas de las FDS y de las tropas de Estados Unidos.
Pero poco antes del asalto, las FDS retiraron a tres destacamentos que cuestodiaban puntos cercanos a la prisión, lo que proporcionó una ruta de escape para varios cabecillas del Califato Islámico hacia lugares custodiados por la CIA.
Un coche bomba fue capaz de atravesar el cordón de seguridad de las FDS para llegar hasta la misma puerta de la prisión, a sólo un kilómetro del mayor cuartel militar estadounidense de la región.
El ataque coincidió con una operación planificada de antemano para liberar a los detenidos, calificados como “arrepentidos”, para agruparlos en dos lugares específicos cercanos a Hasakah. Aprovechando el caos de las incursiones estadounidenses, Estados Unidos transportó a 750 terroristas del Califato Islámico en autobuses y todoterrenos a lugares del desierto de Al Bukamal, al oeste de la frontera sirio-iraquí, y al este de la montaña de Al Bishri, al sur de Deir Ezzor.
Entre los miembros del Califato Islámico liberados se encontraban varios altos mandos, muchos de ellos de nacionalidad árabe, belga y holandesa. Estaban protegidos por unidades de las FDS y el espacio aéreo estaba protegido por aviones de reconocimiento de Estados Unidos que vigilaban su avance y garantizaban su seguridad, evitando las rutas de alto riesgo.
La inteligencia irakí abre una investigación sobre la fuga
La inteligencia irakí ha investigado esta fuga porque el objetivo era introducir 5.000 terroristas en el país. Por este motivo el ejército irakí ha intensificado sus patrullas en la frontera con Siria.
Un documento de la misma fuente irakí afirma que el número de detenidos del Califato Islámico es mayor que el anunciado por las FDS, aunque no suministra cifras concretas.
Para justificar su complicidad en la fuga, las FDS culparon a los turcos y a los rusos de ella, una excusa reiterada por el Times (2). Pero el asunto ocurrió justamente al revés. El ataque a la cárcel fue precedido por una campaña militar sirio-rusa procedente del este de Homs y encaminada hacia las profundidades de la Badia, el desierto sirio.
El objetivo es eliminar a unos 2.000 terroristas del Califato Islámico desplegados en varios puntos de la región. Las tropas que custodian el aeropuerto T4 fueron reforzadas y se han iniciado patrullas aéreas sirio-rusas con cazas rusos Su-34 y Su-35, aviones de alerta temprana A-50 y aviones sirios MiG-23 y MiG-29.
El plan es, pues, muy ambicioso se desplegará a lo largo de los Altos del Golán, la región sur, el río Éufrates y el norte de Siria. Los pilotos sirios controlan el espacio aéreo y dan cobertura a los cazas, mientras que las tripulaciones rusas realizan ataques contra objetivos terrestres.
El Ministerio de Defensa ruso ha anunciado que este tipo de misiones conjuntas se llevarán a cabo de forma regular. El motivo lo explicó Alexei Zaitsev, subdirector del Departamento de Prensa del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia: Estados Unidos y las FDS no han logrado eliminar al Califato Islámico ni garantizar la seguridad en una de las regiones que controlan: el noreste de Siria.
“El éxito del ataque del Califato Islámico a la prisión de Sinaa, donde estaban recluidos los terroristas más peligrosos, demostró una vez más que el ejército estadounidense ha fracasado en su misión”, dijo Zaitsev.
La presencia militar de Estados Unidos en Siria es un “ocupación” y uno de sus objetivos es crear un enclave kurdo en el norte, como ya hicieron en Kosovo tras la Guerra de los Balcanes.
(1) https://www.dumptheguardian.com/world/2021/nov/22/former-is-fighters-say-they-paid-way-out-of-kurdish-jail-in-reconciliation-scheme
(2) https://www.thetimes.co.uk/article/west-has-ignored-jihadist-prisons-but-it-cant-ignore-hasakah-attack-g8wjl9qxp