El Pentágono ha advertido a Netanyahu que los buques de guerra estadounidenses pronto podrían ser enviados de vuelta a casa porque no pueden permanecer en las aguas del Mediterráneo oriental protegiendo a Israel indefinidamente.
Con respecto a una posible guerra regional más amplia y un ataque iraní, los medios israelíes informaron el viernes que las tensiones se deben reducir en algún momento porque “los portaaviones estadounidenses no pueden permanecer en la región indefinidamente”.
Actualmente, nada menos que dos portaaviones –el Theodore Roosevelt y el Abraham Lincoln– y los buques de guerra que los acompañan se encuentran en aguas regionales de Oriente Medio. Fueron desplegados allí tras las amenazas de Irán hace unas semanas.
Toda la región se está preparando para una respuesta iraní al asesinato por parte de Israel del dirigente de Hamas, Ismail Haniyeh, el 31 de julio en Teherán. Estados Unidos ha acercado sus buques de guerra a las costas israelíes para ayudar a derribar los misiles balísticos y drones iraníes.
Al parecer, el submarino de misiles guiados Georgia, que puede disparar misiles de crucero y transportar comandos SEAL de la Marina, también se encuentra en la zona.
No se sabe si Irán ha abandonado su amenaza de ataque, o si sólo está demorando la respuesta para que el Pentágono retire sus activos navales.
En Washington han quedado decepcionados por las declaraciones de Netanyahu sobre el fracaso de las negociaciones para alcanzar un acuerdo de alto el fuego con Hamas, que dio por “muertas”.
Mientras, aumentan las divisiones dentro del gobierno israelí sobre el final de la masacre de Gaza. Washington envió un mensaje a Israel para oponerse a la destitución del ministro de Defensa, Yoav Gallant, diciendo que estaban satisfechos de la cooperación con él, según el Canal 13 israelí.
El mensaje fue “educado, pero claro”, añadie el Canal.
Pero aunque los portaaviones estadounidenses se retiren de la región, las armas de Washington continúan fluyendo hacia Israel. Sin las armas estadounidenses, Israel sólo podría mantener sus operaciones en Gaza durante unos meses.
Da la impresión de que la Casa Blanca ha ejercido suficiente presión sobre Netanyahu para obligarle a firmar una tregua y un acuerdo de intercambio de prisioneros, pero el gobierno israelí ha seguido su propia línea.
Las masivas protestas israelíes tras la recuperación de seis rehenes muertos han exigido la destitución de Netanyahu. Las familias de las víctimas dicen que en cada ocasión Netanyahu frustró un acuerdo de tregua para la liberación de los rehenes, optando en cambio por priorizar las matanzas contra la resistencia palestina.