En diciembre de 2022 China botó el primer “portadrones”, construido en un astillero chino del río Yangtsé, otro ejemplo más de la innovación china en aviación naval, del que nada se había publicado hasta ahora (*).
Es una especie de portaaviones ligero, según se observa en una imagen obtenida vía satélite. Se conocían los tres portaaviones de China. El más grande y capaz es el Fujian, que actualmente están probando en alta mar.
Pero los portaaviones tienen 300 metros de longitud y más de 100.000 toneladas de desplazamiento. Incluso de los portahelicópteros suelen rondar los 200 metros. El recién llegado a la Marina china es un buque de dimensiones relativamente modestas (alrededor de 100 metros de largo por 30 metros de ancho), bastante comparable a los portaaviones de escolta de la Segunda Guerra Mundial o a una pequeña fragata actual, adaptado para drones de ala fija.
Los drones son económicos, están equipados con explosivos de alto rendimiento y son un arma formidable por su capacidad de saturación. Son un arma para las guerras de desgaste contra los ejércitos occidentales, muy tecnificados.
Los drones han cambiado las reglas del juego en los campos de batalla en tierra y ahora lo harán en el mar. Las principales armadas del mundo ya los están probando desde los portaaviones habituales, y algunas de ellas, en particular Irán y Turquía, están diseñando portadrones.
En la guerra de drones, China es hoy la primera potencia mundial, muy por delante de Estados Unidos. El astillero del río Yangtsé ya ha construido antes varias barcazas objetivo de alta tecnología y dos grandes naves nodrizas para drones. Todos ellos actúan como fuerzas opuestas en los entrenamientos militares.
(*) https://www.navalnews.com/naval-news/2024/05/china-builds-worlds-first-dedicated-drone-carrier/