La fragmentación del mercado mundial sigue su curso, incluso en el sector financiero. El viernes 5 grandes monopolios chinos que cotizan en Estados Unidos anunciaron su retirada de Wall Street. Como ya adelantamos en una entrada anterior, una ley aprobada en 2020 por el Congreso de Estados Unidos obliga a las empresas que cotizan en Estados Unidos a certificar sus cuentas por una empresa autorizada antes de 2024. Las empresas chinas lo consideran como una forma de espionaje industrial.
Algunas empresas chinas han preferido marcharse de Wall Setreet. Los primeros en retirarse han sido dos gigantes petroleros, Sinopec y PetroChina. El peso pesado de los seguros, China Life Insurance, el gigante chino del aluminio Chalco y una filial de Sinopec con sede en Shanghai han anunciado movimientos similares.
En sus comunicados los monopolios chinos aducen razones espurias para abandonar la bolsa de Nueva York. El regulador de los mercados financieros de China justificó las decisiones explicando que se basaban en consideraciones comerciales.
Hace tiempo que las empresas chinas se financiaban a través de la cotización en Estados Unidos. En 2014, Alibaba, pionera del comercio electrónico en China, recaudó 25.000 millones de dólares en Wall Street, la mayor oferta pública inicial de todos los tiempos.
Debido a la creciente rivalidad con Washington, especialmente en el ámbito tecnológico, China anima ahora a sus empresas a buscar financiación en sus mercados de valores (Hong Kong, Shanghai, Shenzhen y Pekín).
Sometidas a una vigilancia y unas restricciones más estrictas en Estados Unidos, muchas empresas chinas optan también por una segunda cotización en el mercado de valores de su país, como el buscador Baidu o Alibaba, que cotizan en Hong Kong.
Varios países están a la caza para que los gigantes chinos se instalen en su territorio, especialmente Suiza. Desde el 25 de julio las empresas chinas pueden incorporarse a la Bolsa de Suiza en una cotización secundaria. Las empresas que cotizan en Suiza pueden emitir GDR (*) en China en las bolsas de Shanghai y Shenzhen. Las acciones correspondientes se depositan en un banco chino, según explicó la Bolsa de Suiza en el comunicado en el que anunciaba el lanzamiento.
Varias empresas chinas han sido aprobadas por la bolsa suiza, entre ellas Gotion High-Tech, una empresa de baterías de litio que cotiza en Shenzhen, y Keda International, una empresa que cotiza en Shanghai y está especializada en materiales de construcción y cerámica.
(*) Los GDR o recibos internacionales de depósito son instrumentos financieros utilizados por los mercados privados para obtener capital en dólares estadounidenses o en euros.