Discretamente el gobierno del Reino Unido ha aprobado una nueva ley que permite a la policía acceder a los datos confidenciales del Servicio Nacional de Salud (NHS) de las personas sujetas a cuarentena (*).
El NHS obtiene los datos médicos a través de una página web o una llamada telefónica cuando una persona da positivo en las pruebas de coronavirus y se le pide que se aísle durante 10 días. El NHS también puede solicitar y recopilar información sobre cualquier persona que haya estado en contacto con la anterior.
La línea de separación entre el sistema de salud y la policía ha desaparecido.
En virtud de la reforma del Reglamento de Protección de la Salud, la policía puede acceder a los datos obtenidos en las pruebas y el rastreo “con el fin de prevenir, investigar, detectar o perseguir las infracciones de este Reglamento”.
Las infracciones incluyen la celebración de reuniones multitudinarias de más de 30 personas o la apertura de un local comercial que haya sido objeto de una orden de cierre en virtud de las normas de contención del coronavirus.
El gobierno ha aprobado esta reforma sin contar con el Parlamento.
La confidencialidad de los informes médicos es la base de cualquier sistema sanitario público y, sin embargo, el gobierno británico ha acabado con ella cuando más necesaria es.
La nueva norma disuadirá a la población de hacerse pruebas de coronavirus o de proporcionar información médica a nadie, y menos al sistema de salud.
No es la primera vez que el gobierno británico es criticado por sus ataques a la confidencialidad médica. El verano pasado se reveló que la aplicación de localización de contactos del NHS británico violaba las leyes de protección de datos y almacenaba informes personales de los usuarios durante 20 años.
No sólo los datos confidenciales divulgados por el NHS suscitan una preocupación creciente, sino que la forma en que se recogen estos datos también infringe las libertades fundamentales.
Se supone que la aplicación de rastreo de contactos del NHS es obligatoria, pero a los ciudadanos británicos se les niega el acceso al trabajo si no la utilizan. Además, los usuarios han sido amenazados con visitas de la policía si se niegan a descargar la aplicación.
La policía del Reino Unido también ha sido criticada por tomar medidas contra los ciudadanos que han infringido el confinamiento y por pretender entrar en los domicilios privados de los sospechosos de infringir las medidas sanitarias.
(*) https://www.legislation.gov.uk/uksi/2021/97/regulation/4/made
Curioso: Hoy ha habido una gran manifestación por la libertad de Pablo Hasel, y esta web ni mu. Ya me da para desconfiar de UDS.
Hola Daniela.
Aparte de esta web, que no es una web de última hora, nuestros canales de comunicación en Telegram y Twitter han informado puntualmente de este asunto, sin perjuicio de que está en próxima publicación un artículo de análisis -que es la materia de esta página- sobre el mismo elaborado por sus abogados.
Desconfíe todo lo que quiera, pero hágalo de manera fundada.
Un saludo