Se trata de la empresa Palantir, de la que hemos hablado aquí, quien ha elaborado junto a la empresa valenciana Yurest Solutions el software con el que la Generalitat Valenciana administrará las donaciones, a través del portal «Som Solidaritat».
Según la información publicada por el gobierno de Carlos Mazón, esta web permite recopilar y organizar la recepción de comida, material y servicios y que serán administrados por 12 ingenieros «voluntarios» seleccionados por la propia empresa.
Este «donativo» de una empresa fundada por la CIA y principal contratista de las agencias de defensa de los Estados Unidos en materia de soluciones informáticas e inteligencia artificial, forma parte de su estrategia corporativa europea. Palantir ya metió su cabeza en el Servicio Nacional de Salud de Italia.
Bajo el auspicio de la primera ministra Giorgia Meloni, la compañía desarrolla un software que recopila masivas cantidades de datos: huellas digitales, registros telefónicos, conexiones conocidas, imágenes satelitales, registros bancarios y conexiones de redes sociales, reconocimiento facial, etc. Palantir y Gemelli Real World Data se asociaron para buscar «soluciones de investigación en medicina digital».
El Gemelli es el segundo hospital más grande de Italia, uno de los hospitales privados más grandes de Europa y también brinda asistencia médica gratuita como parte del sistema nacional de salud italiano. ¿Para qué querría una empresa vinculada a la CIA toda esa gran cantidad de datos de los pacientes italianos, y canalizados de manera altruista a través de su Fundación Palantir?. Es la misma pregunta que cabe hacerse respecto a la población valenciana a la que se destinarán estas donaciones.
El equipo de gestión de ayudas integrado en la iniciativa Som Solidaritat, está integrado por la Generalitat, la Diputación de Valencia, Emergencias, Policía Nacional, Guardia Civil y Protección Civil, todos ellos administrados y gestionados por Palantir. Esta misma operatoria es la que ha llevado a Palantir a hacerse con el poderoso banco de datos del Servicio de Salud Británico, el cuál administra desde noviembre de 2022.
Por una reciente denuncia de Amnistía Internacional se supo que la multinacional norteamericana está en negociaciones con el gobierno laborista de Keir Starmer para hacerse cargo del banco de datos penitenciario de Gran Bretaña. El objeto de estas negociaciones no tiene desperdicio: Palantir había estado en conversaciones con el Ministerio de Justicia y el Servicio de Prisiones sobre cómo el intercambio de información y análisis de datos podría aliviar los desafíos carcelarios y permitir una comprensión granular de la reincidencia, agregó el ejecutivo. Dicho de otra manera, se trata de crear una siniestra base de datos predictiva.
Por ahora, este anuncio de la Generalitat le ha supuesto a la compañia norteamericana acceder a todo un banco de datos que servirá para cuantificar e intervenir en una reconstrucción que será millonaria, y donde muchas empresas ya están haciendo cola para sacar tajada.