El escándalo del CNI está embarrando el terreno de la llamada «confianza» de los inversores. Se trata de un indicador muy subjetivo pero relevante, porque implica hasta qué punto España como Estado es capaz de asumir sus compromisos de pago.
El escándalo del CNI está embarrando el terreno de la llamada «confianza» de los inversores. Se trata de un indicador muy subjetivo pero relevante, porque implica hasta qué punto España como Estado es capaz de asumir sus compromisos de pago.