¿Quién saboteó en septiembre de 2022 los gasoductos NordStream que transportaban gas ruso a Europa Occidental a través del Mar Báltico? Como era previsible se iniciaron varias “investigaciones” oficiales para echar tierra encima.
Una de ellas la inició la Fiscalía sueca, que ahora acaba de anunciar el fin de su “investigación”. Después de 18 meses no ha podido llegar a ninguna conclusión. Es más, se ha dado cuenta de que no es de su competencia.
“Se han analizado muchos movimientos de barcos para comprender qué sucedió. Además, se llevó a cabo una minuciosa investigación de la escena del crimen y se llevaron a cabo varios interrogatorios al respecto. En el contexto de la situación actual, podemos decir que falta competencia sueca”, dice el fiscal sueco Mats Ljungqvist.
“No hay indicios de que Suecia o ciudadanos suecos estuvieran involucrados en el ataque, que tuvo lugar en aguas internacionales”, concluye el fiscal. Ellos no han sido.
Suecia le pasa la pelota a Alemania. “Colaboramos en la investigación preliminar llevada a cabo por las autoridades alemanas. Como parte de esta cooperación jurídica, pudimos proporcionar elementos que podrían utilizarse como pruebas en la investigación preliminar” que iniciaron, afirmó Ljungqvist, quien no quiso añadir nada más porque el caso es secreto.
Como las explosiones ocurrieron en sus respectivas zonas económicas exclusivas, Dinamarca y Suecia iniciaron sus propias investigaciones. También lo hizo Alemania, ya que este sabotaje afectó a sus suministros de gas natural.
Menos los fiscales suecos, todo el mundo sabe que los gasoductos fueron volados por la Marina de Estados Unidos, quizá con el apoyo de Reino Unido. El año pasado el periodista estadounidense Seymour Hersch afirmó que el atentado había sido llevado a cabo por la Marina estadounidense, con el apoyo de los noruegos.
Un avión de patrulla marítima estadounidense P-8A Poseidon sobrevoló el Mar Báltico poco antes de las explosiones, con su transpondedor silenciado.