Hipólito Yrigoyen |
Es necesario para tratar el tema desvincular la figura del General Perón de lo que en definitiva es el peronismo.
Comenzaremos por ubicar a Perón en la Argentina de los años 30 del pasado siglo, donde Juan Domingo Perón, en aquellos tiempos con el grado de capitán participa como subordinado en el golpe militar del 6 de septiembre de 1930 en el derrocamiento del Presidente de la República Dr. Hipólito Yrigoyen.
Encabeza el golpe, el General José Evaristo Uriburu, por entonces director del Colegio Militar de la Nación, equivalente argentino de la Academia General Militar española, de donde salen los oficiales del ejército de tierra. El Capitán Juan Domingo Perón era por entonces profesor de Historia Militar en dicho Colegio, y a las órdenes de Uriburu marcha a la casa particular del presidente de la República en la calle Brasil del barrio de Constitución de Buenos Aires, y junto con otros militares detiene al legítimo presidente de la República.
Acto seguido una turbamulta penetra en la casa del Dr. Yrigoyen y arrojan por un balcón sus escasos enseres consistentes en una cama, una mesilla de noche, una mesa de trabajo, y un armario donde guardaba su ropa.
La chusma que invade su casa queda asombrada ante la pobreza del mobiliario, y se retira avergonzada. Pero el mal ya está hecho. El golpe militar del 6 de septiembre de 1930 inaugura el largo rosario de golpes militares, planteos y «aprietes» protagonizados por el ejército argentino, y que culminan con el golpe criminal de Videla y sus conmilitones del 24 de marzo de 1976, que inaugura un nuevo tipo de intervención militar: comienzan las ejecuciones, los «desaparecimientos», las masacres, los robos de bebes, y el saqueo de los bienes de los presos y desaparecidos.
El golpe militar de 1930, coincide en el tiempo con la fundación de la empresa estatal YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales), que fuera impulsada por Yrigoyen y fundada por un militar patriota, el General Enrique Mosconi.
No era ajena al golpe la empresa británica Royal Dutch, antecesora de la ANIOC, (Anglo Iranian Oil Company), que fué nacionalizada por Mohamed Mossadeg, y transformada en NIOC (National Iranian Oil Company), actual empresa petrolera de Irán.
A todo esto, Perón ya con el grado de Teniente Coronel es designado agregado militar en Italia, en tiempos de Benito Mussolini, y permanece en Roma hasta el año 1943.
El gobierno del General Uriburu, inicia lo que se conoce en la historia argentina como la «década infame», que en realidad dura hasta el año 1943, es decir 13 años.
En ese largo período la Argentina padece una serie de gobiernos conservadores de corte liberal que entrega el país atado de pies y manos a la voracidad del capital inglés.La entrega es de tal magnitud, que Argentina es bautizada por Winston Churchill, primer lord del Almirantazgo inglés como el quinto dominio de Inglaterra (Inglaterra tenía cuatro dominios que eran Canadá, Australia, La India y Nueva Zelanda) y Argentina según Churchill, era el quinto dominio.
En ese tiempo el presidente del Banco Central de la República Argentina era un lord inglés, que se llamaba Sir Otto Leguizamón, y para que no hubiera ninguna duda de quien mandaba allí, tenía en su despacho una estatuilla de George Canning, un antiguo primer ministro inglés.
Pero en la década de 1930, los nazis llegaron al poder en Alemania, y se convirtieron en el enemigo más peligroso de Inglaterra, por entonces la primera potencia militar del mundo, y ello implicó que los movimientos patrióticos argentinos que luchaban contra el dominio inglés, vieran con simpatía al gobierno alemán, por aquello de que el enemigo de mi enemigo es mi amigo.
Junto con ello, comenzó a crearse en el ejército una logia que contaba con un enorme apoyo entre los oficiales jóvenes que iban tejiendo una confusa ideología nacionalista, y a veces nazionalista, que era conocida como el GOU (Grupo de Oficiales Unidos), y uno de sus miembros era el ya Coronel Perón.
Hay que tener en cuenta además, que en el año 1939, comienza la segunda guerra mundial en Europa con unos fulgurantes triunfos de los ejércitos alemanes, y que Inglaterra es bombardeada cruelmente, lo cual aviva más aún las simpatías por Alemania; con el consiguiente aflojamiento de la presión de Inglaterra sobre Argentina.
Pero todo esto implicaba también que como consecuencia de la guerra las importaciones desde Europa disminuyen drásticamente, lo que obliga a fabricar en el país muchos productos manufacturados que ya no se pueden importar.
Esto último se traduce en que nace una nueva burguesía, cuyos intereses chocan con los intereses de los importadores, tradicionalmente ligados a la oligarquía terrateniente, y como necesaria consecuencia, se crea un incipiente proletariado, generalmente de origen rural, que se adapta rápidamente al trabajo industrial, y conoce pir primera vez una jornada de ocho horas, en lugar de las largas jornadas de diez, doce y catorce horas de trabajo mal pagado.
El 4 de junio de 1943, el ejército da un golpe de estado, y destituye al Presidente de la República Dr. Ramón Castillo. Encabezan el golpe los generales Edelmiro Farrell, José Ramirez, y Guillermo Rawson, todos miembros del GOU, y designan un nuevo gobierno el 5 de junio de 1943, donde en 24 horas hay sucesivamente tres presidentes de la República Argentina, quedando finalmente el General Farrell al mando del país.
En ese gobierno, es designado como Secretario de Trabajo y Previsión, el Coronel Juan Domingo Perón.