El aborto está despenalizado en Portugal hasta las 10 semanas de gestación desde 2008, tras ser aprobado en referéndum un año antes.
La propuesta que evalúa el Ministerio de Salud portugués es que los médicos podrían reducir sus bonificaciones salariales por tener pacientes que se sometan a una interrupción voluntaria del embarazo o contraigan enfermedades de transmisión sexual (ETS). La propuesta está en manos del Ministerio de Salud y ha desatado polémica en el país.
La propuesta, que introduce nuevos criterios de evaluación para el cálculo de las bonificaciones salariales de los médicos en determinados tipos de centros de salud, se publicó en exclusiva en el diario nacional portugués Público el pasado 10 de mayo.
Según el diario, esta propuesta ya fue validada por la Dirección General de Salud (DGS) y ahora está en manos del Ministerio.
La ministra de Sanidad, Marta Temido, dijo que los criterios “tienen un contexto específico” y “no penalizan ni a los pacientes ni a los médicos”.
“Estamos hablando de algo que hay que ver en contexto. Esa es una dimensión que se llama planificación familiar y el tema es el acompañamiento de las mujeres en edad fértil”, dijo Temido para justificar por qué no se incluye a los hombres con ETS.
Temido dijo que no se cuestionan las elecciones personales de las mujeres, ni se juzgan los abortos.
La propuesta ha generado polémica en el país, donde tanto colegios de médicos como de mujeres han criticado los criterios que se barajan.
La Federación Nacional de Médicos (FNAM) ha denunciado que monitorizar enfermedades de transmisión sexual en mujeres, sin hacerlo en hombres, “constituye una discriminación de género inaceptable”.
En un comunicado, la organización anunció que había remitido la situación a la Comisión de Ciudadanía e Igualdad de Género, diciendo que estos criterios reflejan “una visión patriarcal de la sexualidad, que presenta la idea de que las enfermedades venéreas son problemas de mujeres”.
La Asociación Nacional de Unidades de Salud de la Familia también ha admitido que la propuesta podría llevar a los médicos a presionar a las pacientes para que no opten por abortar.
El aborto hasta la décima semana de embarazo está despenalizado en Portugal desde 2008, tras ser aprobado en referéndum un año antes.
La mejor y más eficaz forma de acabar con esta situación (no digo ‘problema’, porque se ha considerado una palabra que pueda entrañar agravio a las nuevas generaciones..) es ser un tipo raro (de pensamientos poco convencionales) y feo, no tendrás nunca tribulaciones de este tipo, un factor determinante, jejejeje.. Algo bueno tenía qué tener..;)!