Desde el colapso de FTX, la segunda bolsa de criptomonedas más grande del mundo, el mercado está al borde del precipicio. Otro chiringuito, Génesis, está a punto de ir al camposanto.
A su vez, los apuros de Genesis han afectado a una tercera plataforma de criptomonedas, Gemini, que ha paralizado los canjes de su producto Earn. “Es un clima del fin del mundo en los mercados de criptomonedas”, dice Bloomberg.
La semana pasada, Genesis ya suspendió temporalmente la amortización de préstamos en su unidad crediticia, Genesis Global Capital, y congeló las retiradas de fondos por una falta de liquidez agravada por la caída de FTX.
Genesis lleva días tratando de recaudar al menos 1.000 millones de dólares y está ya advirtiendo a los especuladores de que podría recurrir a la quiebra si sus esfuerzos no llegan a buen puerto
Las decenas de miles de millones de dólares de intercambios diarios de criptomonedas sólo son posibles gracias a la existencia de estas plataformas. Sin una plataforma de intercambio, no hay intercambio. Si no puedes intercambiar no tienes un mercado de criptomonedas. Y si no tienes mercado, no tienes liquidez. Si no tienes liquidez, tus activos no tienen valor.
Es un verdadero colapso del mercado de criptomonedas que, como ya hemos expuesto en otra entrada, es una de las condiciones necesarias para imponer las criptomonedas de los bancos centrales.
También van a aprovechar la situación para “regular” el mercado y reforzar el control público, no sólo sobre el mercado, sino también sobre las personas.