En Doha los mediadores en las negociaciones de paz de Gaza han propuesto un plan de tres fases, elaborado: un alto el fuego duradero, la liberación de los rehenes israelíes en manos de Hamas y la retirada de las tropas israelíes de Gaza.
Ayer la resistencia palestina reafirmó que cualquier acuerdo de alto el fuego en Gaza debe incluir la retirada total de las tropas invasoras israelíes del enclave palestino.
“Cualquier acuerdo debe resultar en un alto el fuego integral, una retirada completa [del ejército israelí] de Gaza y el regreso de los refugiados”, dijo Hossam Badran, un dirigente de Hamás, tras la reanudación de las conversaciones de paz.
Estados Unidos, Qatar y Egipto se reunieron con una delegación israelí en Qatar, mientras el número de muertos palestinos en la guerra de diez meses de Israel superaba los 40.000 más otros 10.000 desaparecidos.
Un dirigente palestino dijo que Hamas no participaría en las conversaciones, pero que sus dirigentes, que residen en Qatar, estaban dispuestos a discutir cualquier propuesta de los mediadores, como lo han hecho en rondas anteriores.
El delegado estadounidense calificó de “constructivas” las conversaciones iniciadas entre los mediadores de Qatar, Egipto y Estados Unidos sobre un posible acuerdo de alto el fuego en Gaza.
Por su parte, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Qatar, Majed Al Ansari, afirmó que hoy continuaban las discusiones sobre el alto el fuego y la liberación de los rehenes.
El portavoz añadió en un comunicado que los mediadores continúan sus esfuerzos encaminados a alcanzar un alto el fuego que facilite la liberación de los rehenes y permita la entrada de la mayor cantidad posible de ayuda humanitaria en Gaza.
Los mediadores han pasado meses intentando elaborar un plan de tres fases en el que Hamas liberaría a los rehenes capturados en el ataque del 7 de octubre a cambio de un alto el fuego duradero, la retirada de las tropas israelíes de Gaza y la liberación de los palestinos secuestrados en las cárceles israelíes.
Un alto el fuego en Gaza es crucial para relajar la tensión en Oriente Medio y persuadir a Irán y a Hezbollah de que se abstengan de lanzar represalias contra Israel, después de que Tel Aviv asesinara a un alto comandante de Hezbollah y al dirigente palestino Ismail Haniyeh.