La Dirección Principal de Inteligencia de Ucrania (GUR) ha llevado a cabo dos operaciones aerotransportadas de alto riesgo con helicópteros Black Hawk suministrados por Estados Unidos en la zona de Pokrovsk, en la provincia de Donetsk, mientras Rusia avanzaba rápidamente. Pokrovsk, un centro logístico crucial, llevaba más de un año sitiada.
A finales de octubre, las fuerzas rusas controlaban aproximadamente el 80 por cien de la ciudad y habían cercado a las fuerzas ucranianas restantes en la zona. Estas misiones, dirigidas por Kyrylo Budanov, jefe de la GUR, tenían como objetivo infiltrar fuerzas especiales de élite en áreas disputadas o reclamadas por Rusia, pero fracasaron.
La operación fallida pretendía desarticular posiciones enemigas, asegurar puntos fuertes y restablecer las líneas de suministro, pero eso carece de sentido. La primera misión, lanzada la noche del 28 de octubre, consistió en el despliegue de 11 comandos de la GUR en un campo al noroeste de la zona industrial de Pokrovsk.
Las imágenes de vídeo muestran a las tropas desembarcando y desplegándose rápidamente. La inserción se realizó de noche, con escasa visibilidad, para minimizar el riesgo de detección, pero drones de reconocimiento rusos detectaron el helicóptero volando a baja altitud y abatieron a los 11 comandos.
La siguiente misión, lanzada la noche del 30 de octubre con dos helicópteros Blackhawk, insertó dos grupos (un total de unos 20 a 24 soldados) en la misma zona, y corrieron la misma suerte que el primero.
Para comprender las razones de estas dos misiones fallidas, es fundamental entender los vínculos entre la GUR, el servicio de inteligencia militar adscrito al Ministerio de Defensa, y la CIA, que ha forjado una de las alianzas más estrechas entre centrales de inteligencia extranjeras.
Esta relación, establecida en el más absoluto secreto tras el Golpe de Estado de 2014, habría transformado a la GUR en una unidad sofisticada, célebre por sus audaces ataques contra Moscú. La CIA invirtió decenas de millones de dólares en la reconstrucción del GUR, proporcionándole entrenamiento, equipo e instalaciones seguras, además de compartir información de inteligencia que resultó crucial durante la invasión rusa a gran escala en 2022. Antiguos oficiales estadounidenses describen esta operación como una “oportunidad histórica” para contrarrestar a Rusia, convirtiendo a la GUR en “nuestra protegida”.
Si bien los medios occidentales afirman que esta operación contó con el apoyo de la OTAN, la explicación más probable es que se trató de una operación conjunta de la CIA y el GUR para extraer a oficiales paramilitares de la CIA infiltrados en las fuerzas ucranianas en Pokrovsk y sus alrededores. No creo que se trate de simples agentes de la CIA… Creo que al menos dos, posiblemente más, oficiales paramilitares de alto rango de la CIA se encuentran actualmente atrapados en Pokrovsk.
Dado que los medios occidentales insisten en que estas dos misiones fallidas se llevaron a cabo bajo las órdenes de Budanov, jefe del GUR, y que trabaja para la CIA y no para el ejército estadounidense ni la OTAN, todo apunta a que se trata de una operación de la CIA.
Los dos intentos de extracción en tres días son una muestra más de la desesperada situación que atraviesan las tropas ucranianas y sus asesores occidentales en Pokrovsk.
Larry Johnson https://sonar21.com/ukraines-suicide-helicopter-missions-why/