El mensaje dura 30 segundos y Moskovsky Komsomolets lo reproduce en su sitio web, asegurando que es una llamada de Skripal a su sobrina Viktoria, que vive en Rusia.
Según el periódico, Skripal llamó a su sobrina el 9 de mayo, fiesta en la que Rusia celebra el día de la victoria sobre los nazis en la Segunda Guerra Mundial. “Todo está bien para mí. Por fin para nosotros, para Julchka”, el diminutivo de su hija Julia, también supuestamente envenenada e ingresada en el mismo hospital.
“Quería saber cómo estabas”, añade el espía de 67 años en el buzón de voz.
Según Moskovsky Komsomolets, es la segunda vez que Skripal llama a su sobrina Viktoria, que vive en Yaroslavl, al noreste de Moscú. La primera vez, según el periódico, fue pocos días después de que el marido de Viktoria Skripal fuera golpeado en la calle por un hombre que la insultó por estar vinculada al doble espía.
Skripal es un antiguo coronel de la inteligencia rusa, condenado en Rusia por espiar para Reino Unido e intercambiado luego por otros espías dobles. Tras establecerse en las islas británicas, fue encontrado inconsciente el 4 de marzo de 2018 en Salisbury en un parque, al lado de su hija Julia.
Ambos fueron ingresados inmediatamente en un hospital y, tras el alta médica, no han hablado en público. En torno a su caso, el servicio secreto británico orquestó una de las más formidables campañas de intoxicación mediática que se recuerdan, seguida fielmente por las grandes cadenas de prensa de todo el mundo.
El Reino Unido acusó a Rusia de envenenar al padre y a la hija de una manera rocambolesca en represalia por su colaboración con el MI6, el espionaje británico. El montaje sirvió coo excusa para tensar aún más las relaciones diplomáticas con Moscú.