Níger ha cerrado la frontera con Benín y el Primer Ministro, Alí Mahaman Lamine Zeine, lo justifica por razones de seguridad. Sospecha que el gobierno francés está entrenando mercenarios en Benin para desestabilizar a Niamey.
“Por simples razones de seguridad hemos mantenido cerrada la frontera” con Benín, indicó el Primer Ministro durante una rueda de prensa convocada en Niamey.
“Hemos decidido soberanamente mantener cerrada nuestra frontera con Benin” porque “en el territorio de Benin hay bases francesas” y “en algunas de ellas entrenan a terroristas que vienen a desestabilizar nuestro país”, explicó Zeine.
Utilizando un mapa satelital, Zeine designó cinco áreas que supuestamente albergan esas bases militares, como el Parque W, a caballo entre las fronteras de Níger y Burkina Faso.
No obstante, el jefe del Estado Mayor del ejército francés, el general Thierry Burkhard, lo niega de plano: “No hay ninguna base militar francesa en Benin” y “ya no hay una misión militar permanente”.
El miércoles el Presidente beninés, Patrice Talon, pidió al gobierno de Niamey que reabra la frontera común y normalice las relaciones diplomáticas, amenazando con bloquear sus exportaciones de petróleo desde el puerto beninés de Semè Kpodji en caso contrario.
Níger estará listo para reabrir la frontera con Benin “cuando nuestro territorio sea seguro”, respondió el Consejo Nacional para la Salvaguardia de la Patria.
Benín reabrió su frontera con Níger tras el anuncio a finales de febrero del fin de las sanciones económicas impuestas a Niamey por la Cedeao (Comunidad Económica de los Estados de África Occidental). La organización regional actuó en respuesta al golpe de Estado del 26 de julio del año pasado, que derrocó al presidente Mohammed Bazoum.
Níger ha reabierto su larga frontera con Nigeria pero la ha mantenido cerrada con Benin.
Zeine acusa al gobierno beninés de haber violado “una docena de acuerdos bilaterales” y otros celebrados entre Níger, Benin y China, relativos al transporte de petróleo nigerino desde los pozos petrolíferos de Agadem, al este de Níger, hacia el puerto de Semé.
Sin embargo, espera que se encuentre una solución, asegurando que ha pedido a los mediadores chinos que intercedan con el gobierno beninés.