Ayer el Tribunal Internacional de Justicia instó a Israel a implementar de manera “inmediata y efectiva” las medidas provisionales que ordenó el mes pasado para prevenir el genocidio de Gaza.
“El Tribunal observa que los acontecimientos más recientes en la Franja de Gaza, y en Rafah en particular, empeoran exponencialmente lo que ya es una pesadilla humanitaria con consecuencias regionales incalculables, como ha indicado el Secretario General de la ONU”, dice un comunicado de prensa del Tribunal en respuesta a la solicitud de medidas adicionales planteada por Sudáfrica.
La “peligrosa situación” en Gaza y Rafah, ciudad en el extremo sur del enclave palestino, “requiere la aplicación inmediata y efectiva de las medidas provisionales indicadas en l resolución de 26 de enero de 2024”, dice el Tribunal, añadiendo que eso “no requiere la indicación de medidas provisionales adicionales”.
“El Estado de Israel sigue obligado a respetar plenamente sus obligaciones bajo la Convención sobre Genocidio y dicho decreto, en particular garantizando la seguridad de los palestinos en la Franja de Gaza”, retiera el principal órgano judicial de la ONU.
Sudáfrica llevó el caso de genocidio contra Israel ante la Tribunal Internacional de Justicia a finales de diciembre de 2023 y pidió que impusiera medidas de emergencia para poner fin al derramamiento de sangre en Gaza, donde han sido asesinados casi 30.000 palestinos desde el 7 de octubre.
Ayer Sudáfrica acogió con satisfacción la decisión del Tribunal Internacional de Justicia. “El Tribunal confirmó nuestra opinión de que la peligrosa situación requiere la aplicación inmediata y efectiva de las medidas provisionales indicadas por el Tribunal en su orden del 26 de enero de 2024, que son aplicables a toda la Franja de Gaza, incluida Rafah”, dijo Clayson Monyela, portavoz sudafricana de Relaciones Internacionales y Cooperación.
En un primer veredicto, emitido el 26 de enero en el caso entre Sudáfrica e Israel por las matanzas de Gaza, el Tribunal Internacional de Justicia ordenó a Israel que tomara medidas para impedir actos de genocidio contra los palestinos.
Según el fallo de la Tribunal Internacional de Justicia, el gobierno Tel Aviv también debe tomar medidas inmediatas y efectivas para permitir la prestación de los servicios básicos y la ayuda humanitaria que el enclave palestino necesita.
No obstante, el Tribunal con sede en La Haya no ordenó un alto el fuego.
Desde el 7 de octubre el ejército israelí ha obligado al 85 por cien de la población de Gaza a desplazarse internamente en un contexto de grave escasez de alimentos, agua, bebida y medicinas, mientras que el 60 por cien de la infraestructura del enclave resultó dañada o destruida, según la ONU.
A pesar de las protestas internacionales, ahora Israel planea una invasión terrestre de Rafah, donde ya hay alrededor de 1,4 millones de refugiados palestinos. Netanyahu prometió “luchar hasta la victoria completa” y eso incluye ejecutar una gran masacre en Rafah.