Alemania crea una base de datos para militarizar a la sociedad

Los ejércitos europeos no tienen armas pero, aunque las tuvieran, tampoco tienen quién las dispare. En los ochenta se profesionalizaron, pero los europeos no quieren ir a filas ni aunque les paguen. Se han convertido en fuerzas minúsculas, incapaces de participar una guerra entre iguales.

El ejército alemán envejece y, además, sufre una grave escasez de efectivos. Cada año se ponen a disposición 15.000 plazas y sólo se cubren dos tercios de ellas. Así, quedan vacantes 5.000 plazas. Los jóvenes ni siquiera se animan a alistarse aireando el espantajo de la “amenaza rusa”. El 20 por cien de los reclutas abandona el ejército a los seis meses de alistarse.

En junio el número de soldados no llegaba a 180.000 soldados. El gobierno quiere llegar a los 460.000 pero no sabe cómo. ¿Conscriptos?, ¿voluntarios?, ¿ambos? En caso de guerra, el gobierno de Berlín tampoco sabría siquiera lo que tiene que hacer, ni a quién llamar a filas.

Parece que quieren dar marcha atrás, volver al servicio militar obligatorio. El gobierno alemán lo ha anunciado de una manera críptica, con un proyecto de ley que estipula que todos los hombres que cumplan 18 años a partir del próximo año deberán completar un cuestionario digital para confirmar (o no) su voluntad y su capacidad para participar en el servicio militar.

Es otro censo que, además de controlar la opinión de sus ciudadanos, les debe servir como base de datos para la militarización de la sociedad civil.

Ya que el espantajo de la “amenaza rusa” no cuaja, el gobierno espera despertar el interés de los jóvenes por una posible carrera militar. Intentará identificar a los más motivados para ofrecerles una entrevista con vistas a una posible formación que podría durar entre 6 y 23 meses. La formación se retribuiría en función de los perfiles observados.

Las mujeres también podrán participar en el censo, pero sólo de forma voluntaria. Si se votara la ley, podría marcar el regreso del servicio militar, apenas catorce años después de su desaparición.

Otra opción que ya expusimos en una entrada anterior es la de reclutar extranjeros y como su motivación castrense es nula, el gobierno podría prometerles la nacionalidad, después de varios años en filas.

Lo de alistarse para “viajar por el mundo” no tuvo mucho éxito. El ejército alemán estuvo en Mali hasta el año pasado y llevó a cabo una operación de evacuación en Sudán, pero esos países nunca han sido destinos turísticos apetecibles.

En fin, los intoxicadores alemanes pronostican una guerra con Rusia para dentro de cinco años, pero esta vez no tendrán un ejército de un millón de soldados, como en 1941. Ni siquiera conseguirán llegar a la mitad. Tienen que insistir más en eso de la “amenaza rusa”, crear videojuegos y series de televisión para meterles el miedo en el cuerpo…

Hacen falta más folletos publicitarios del Bunderwehr como éste:

Letonia impone el servicio militar obligatorio a las mujeres

Letonia pretende imponer el servicio militar obligatorio para las mujeres a partir de 2028, anunció Andris Spruds, ministro de Defensa y miembro del partido “Progresistas”. Los motivos son la igualdad de género y la necesidad de reforzar el ejército, que quiere reclutar 4.000 nuevos efectivos.

“La igualdad de género juega un papel importante en el ejército”, explicó Spruds, justificando la idea del alistamiento obligatorio de las mujeres. El servicio militar obligatorio femenino ya está en vigor en Noruega y Suecia, y Dinamarca planea introducirlo pronto. Spruds señaló a estos países como ejemplos de modernización de las tropas a través de una participación “inclusiva”.

El comandante de las Fuerzas Armadas de Letonia, Leonid Kalnins, expresó su apoyo a la medida, subrayando que era esencial para cumplir con los requisitos de reclutamiento. Actualmente el ejército letón depende del reclutamiento parcial y de voluntarios, pero desde la entrada en la OTAN las necesidades de personal son cada vez más apremiantes.

Kalnins mencionó el objetivo de 4.000 reclutas para 2028, una cifra muy ambiciosa en comparación con los 578 actuales. Según él, sin el reclutamiento de mujeres, este objetivo sería difícil de alcanzar.

También destacó que el reclutamiento femenino podría alentar a más hombres a alistarse voluntariamente en el ejército, reduciendo así las salidas al extranjero para evitar el servicio militar.

Si bien el servicio militar obligatorio para las mujeres no gozaba anteriormente de un amplio apoyo entre los ciudadanos letones, la histeria antirrusa está calando en la sociedad y lo justifica casi todo.

Lo mismo que Polonia, Letonia también ha emprendido la construcción de zanjas antitanques a lo largo de sus fronteras con Rusia y Bielorrusia. Estas fortificaciones, destinadas a impedir cualquier movimiento de vehículos blindados en caso de guerra, forman parte de un plan bélico coordinado por la OTAN. Ya se están construyendo las primeras estructuras de defensa en la frontera ruso-letona.

Deja un comentario

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies

Descubre más desde mpr21

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo