Mari Luz tenía 20 años y era alumna de tercer curso de la facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid. Un policía le disparó a quemarropa un bote de humo en la cabeza.
Desde la muerte de Arturo Ruiz el día anterior a manos de los fascistas, las manifestaciones y actos de protesta se sucedieron, especialmente en las universidades de Madrid, donde los paros fueron totales. Unos 100.000 estudiantes se declararon el huelga por la amnistía y más de 30.000 participaron en asambleas y concentraciones, mientras otros 115.000 habrían tomado parte en las manifestaciones que se desarrollaron a lo largo de toda la mañana.
Tras el desalojo de la Facultad de Derecho de la Complutense, realizado por los antidisturbios sobre las once y media de la mañana, arrojando bombas de humo en el interior del centro, los estudiantes se dirigieron en manifestación hacia la Moncloa y la calle Princesa.
Otras zonas afectadas por las manifestaciones fueron las calles adyacentes a la plaza del Calllao, la calle de La Estrella, glorieta de Bilbao y San Bernardo, donde se colocaron barricadas con bancos y otros objetos.
Inmediatamente aparecieron los fascistas armados con objetos contundentes que apoyaron a la policía contra los manifestantes. Muchos de ellos eran fascistas italianos y miembros de la Triple A argentina que actuaban por encargo.
Al entierro de Mari Luz acudieron más de 3.000 personas. El cortejo fúnebre recorrió un kilómetro hasta llegar al cementerio, cantando La Internacional.