2. El capitalismo ha entrado en su fase terminal. No hay ninguna alternativa a su crisis que no sea acabar con la propiedad privada sobre los medios de producción. El capitalismo no está en crisis; la crisis es el capitalismo.
3. Capitalismo es sinónimo de hambre. No es capaz de garantizar la subsistencia de millones de personas, ni siquiera en los países más desarrollados. Tampoco la vivienda, la salud, la educación y las necesidades más básicas de los seres humanos. Si las ONG quieren dar de comer a los hambrientos, no tienen que alejarse mucho de sus oficinas.
4. En la etapa actual del capitalismo las técnicas de intoxicación han alcanzado unas cotas tales que reducen notablemente la capacidad de resistencia ideológica de las masas y de las organizaciones y medios que actúan en su nombre.
5. La dominación de clase se refuerza cuando las imposiciones políticas se disfrazan con el aval de los científicos, los ingenieros y los técnicos. En tal caso las masas pueden ser conducidas hasta la humillación pública, que es una expresión externa de su sumisión.
6. Las políticas contemporáneas necesitan del apoyo de los científicos tanto como de los periodistas. A cambio, los políticos y los medios convierten a una parte selecta de los científicos en representantes de la comunidad científica, e incluso de la ciencia por antonomasia.
7. El capital monopolista ha trasladado la legitimidad desde las urnas a los científicos. Un político no es autoridad por el cargo que ocupa sino porque hay al menos un científico que sostiene sus decisiones.
8. Cuando los científicos se convierten en fuentes de la autoridad o en la autoridad misma, pueden deslizar una determinada tesis como si fuera ciencia lo mismo que la contraria, porque el centro de gravedad no es la tesis sino los atributos que rodean a quien la defiende.
9. Todos los argumentos basados en la autoridad, incluida la autoridad científica, son siempre de naturaleza teológica y jurídica. No se apoyan en el mundo real sino en una formalización canónica del mismo. Lo real se suplanta con lo formal. El estado de alarma ocupa el lugar de la alarma. Una pandemia, que es una declaración política de la Organización Mundial de la Salud, se toma por una enfermedad extendida en varios países de diferentes continentes.
10. La causa sustituye al efecto y el efecto a la causa. El coronavirus, y las medidas adoptadas con dicho pretexto, se sitúan como causas de la crisis capitalista, en lugar de poner a la crisis como causa del coronavirus y de las medidas políticas subsiguientes que se han implementado en todo el mundo.
11. En una sociedad capitalista donde la minoría domina sobre la mayoría, la verdad nunca está en el primer plano. Las versiones oficiales son falsas casi siempre. La clase dominante se empeña en repetirlas e inculcarlas cuanto más falsas resultan. La pura repetición consigue que las mayores falsedades resulten verosímiles porque las masas las interiorizan como si fuesen propias. Se convierten en familiares.
12. Un mensaje reiterativo es un factótum, un punto de partida que lo explica todo y que, a su vez, no necesita explicación. Es un dogma de la posmodernidad.