Tras un ejercicio naval en Gibraltar, hace dos días el HMS Ambrush colisionó con un mercante cuando permanecía sumergido. Aunque ha tenido daños importantes, la colisión no ha afectado al reactor nuclear, según asegura un comunicado oficial de la Royal Navy.
El mercante tampoco ha tenido daños de consideración, siempre según la Royal Navy, que no ha proporcionado datos de dicho buque, que pudiera tratarse de un petrolero.
Sin embargo, los daños en el HMS Ambrus sí son importantes y le han obligado a permanecer en el muelle de Gibraltar, lo que puede volver a ocasionar problemas al nuevo gobierno de Londres, si el de Madrid cumple las funciones que le competen.
El ministro español de Asuntos Exteriores, García-Margallo, ya ha pedido explicaciones urgentes sobre la avería que presenta el submarino nuclear.
En 2000 ocurrió algo parecido con el HMS Tireless, otro SNA de la clase Trafalgar, hoy retirado de servicio. Tuvo una avería en el circuito de refrigeración del reactor y durante un año tuvo que permanecer inmovilizado en Gibraltar, causando un incidente diplomático entre Reino Unido y España.