Uganda es uno de los países africanos con una política digital más audaz. Consciente de la importancia de internet en las estrategias de desarrollo, el gobierno de Kampala no escatima recursos para dotarse de infraestructuras de última generación.
El 41 por cien de la población aún no tiene conexión a internet. Para implementar una infraestructura de calidad, el gobierno de Uganda obtuvo un préstamo de 1,8 billones de chelines (477,4 millones de dólares) del Banco Mundial.
Con el dinero en el bolsillo, ha firmado una asociación estratégica con China para crear una red digital de alto nivel que permitirá la conexión a internet en todo el país.
Las negociaciones entre Pekín y Kampala comenzaron en la última cumbre China-África. El acuerdo brindará al país asiático la oportunidad de desplegar su experiencia en conectar las áreas más remotas de Uganda a las redes digitales.
Durante una reciente entrevista con los medios, Chris Baryomunsi, ministro de Información, Tecnología y Comunicaciones de Uganda, expresó su satisfacción por la firma del acuerdo. “Estamos construyendo torres para garantizar una cobertura completa de internet”, dijo.
El proceso de transformación digital de Uganda está en pleno apogeo. El gobierno quiere hacer de internet una palanca de desarrollo que cree nuevas oportunidades, sobre todo para los jóvenes. Ha contactado con empresas chinas para llevar a cabo este proyecto que podría llevar al país africano a otra dimensión.
Las poblaciones locales serán las grandes ganadoras. Se beneficiarán de una cobertura digital de buena calidad a costes muy asequibles. Con una población estimada en 45,5 millones de habitantes, será una verdadera ventaja para los ugandeses. En los países agrícolas y mineros, internet puede impulsar un importante desarrollo económico.