“Nadie se ha olvidado [del proyecto]: destinaremos 300 millones de grivnas [20 millones de dólares] para la construcción de la frontera el próximo año. Construiremos una frontera. Instauraremos nuestro control en las fronteras”, dijo Yatseniuk.
Previamente, el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko había dicho que Kiev instalará en la frontera con Rusia un complejo moderno de fortificaciones defensivas al estilo del desaparecido Muro de Berlín.
Posteriormente, el primer ministro Yatseniuk anunció el inicio de la construcción de una “frontera real con Rusia”. El proyecto recibió el nombre de “Muro” aunque más tarde, el primer ministro ucraniano propuso rebautizarlo como «Muro de Europa».
Los golpistas ucranianos planean realizar el proyecto en tres años. Según expertos, construir una frontera con Rusia bajo el mismo principio empleado por Israel le costaría a Ucrania unos 4.000 millones de dólares y tomaría mucho más tiempo que lo declarado por políticos.