Ya sólo queda preguntarse por qué Turquía acumula material de guerra en la frontera y por qué quiere intervenir ahora de una manara decidida en la lucha contra el Califato Islámico, aun a riesgo de chocar con Irak y Siria.
Una explicación posible la expone en una entrevista el general retirado de la fuerza aérea turca Erdogan Karakus, quien asegura que su país prepara una ofensiva militar a gran escala contra el Califato Islámico en el norte de Siria, al margen de la llamada “coalición internacional” que encabeza Estados Unidos. El general asegura que lo hará en coordinación con Rusia y Siria. Así se explica la visita que este fin de semana realiza a Moscú el jefe del Estado Mayor turco.
Si eso es cierto, y no cabe descartarlo, la única explicación que cabe encontrar a las reiteradas protestas sirias por la presencia de tropas turcas sobre su suelo es que las llevan a cabo con la boca pequeña. Si no admiten la invasión turca, al menos la consienten.
Es más interesante la explicación que da el general turco del giro en el alineamiento exterior de su país, que tiene su origen en el proyecto estadounidense del Gran Oriente Medio para dibujar los mapas de la región un siglo después de haberlos dejado en su estado actual. El nuevo mapa no beneficia a Turquía, como se empeñan en difundir por internet los más despistados, sino que sería uno de los países más perjudicados.
El general también asegura que el gobierno irakí es muy débil y que Estados Unidos está aprovechando esa debilidad para sus propios fines, mientras que Turquía trata de contrarrestarla: “Si el gobierno irakí logra capturar Mosul sin la intervención militar de los turcos, se encontrará sometido a Estados Unidos, que llevará al país a la división. Rusia y Turquía han comprendido muy bien ese escenario americano y por eso el jefe del Estado Mayor [turco] ha viajado a Rusia”, asegura el general Karakus.
También añade que aunque Siria no está de acuerdo con Turquía actualmente, lo estará muy pronto, y su “operación conjunta para la liberación de la ciudad siria de Raqqa de los terroristas no se hará esperar porque no hay que dejar Raqqa a los americanos”. Propone un ataque conjunto de Siria, Rusia y Turquía contra Raqqa que permita sostener la unidad de Siria. El gobierno sirio podría controlar amplios territorios y “golpear el proyecto americano del Gran Oriente Medio”.
De lo contrario, concluye el general, el gobierno de Ankara sufriría grandes pérdidas. Por eso trata de unir sus fuerzas a las de Siria y Rusia.