El viernes Putin remodeló el gabinete y dos días después anunció que el general Serguei Shoigu no sería reelegido al frente del Ministerio de Defesa, un cargo que ocupaba desde 2012.
Será reemplazado por un economista, Andrei Belusov, de 65 años, especialista en temas industriales que hasta ahora era el primer vicepresidente del gobierno formado en 2020. Su papel es preparar a Rusia para un estado de guerra permanente con la OTAN. El presupuesto militar es ya del 6,7 por cien del PIB y en lo sucesivo irá a más.
Recientemente Putin dijo que el Ministerio de Defensa debe “estar absolutamente abierto a la innovación, a la introducción de todas las ideas avanzadas, a la creación de condiciones para la competitividad económica”.
“Hoy en día, en el campo de batalla, gana quien está más abierto a la innovación”, repitió Dmitry Peskov, el portavoz del Kremlin.
Según la agencia Reuters, Belusov desempeñó un papel importante en el desarrollo de la fuerza rusa de drones. Ahora se va a encargar de reestructurar el aparato administrativo del Ministerio de Defensa, que en Rusia no tiene un carácter militar tan acusado como en otros países. La misión principal del ministro de Defensa es colaborar con la industria de guerra y organizar la burocracia militar.
Belusov tiene experiencia en gestión administrativa, ya que ha trabajado en el Kremlin desde el cambio de siglo. Entre 2013 y 2020 fue asesor de Putin en asuntos económicos.
En cuanto a Shoigu, fue el creador del Ministerio de Situaciones de Emergencia, del que estuvo a la cabeza entre 1994 y 2012. Llegó a Defensa tras el desastre de Anatoly Serdyukov, involucrado en un escándalo de corrupción.
Su antecesor en el cargo, después de reducir el ejército, se dedicó a privatizarlo. Shoigu tuvo que dar marcha atrás. El ejército dejó de comprar equipo militar extranjero en favor de productos de la industria de defensa rusa.
También lo reorganizó. Las divisiones, previamente reestructuradas en brigadas, fueron reintegradas. Formó las fuerzas de operaciones especiales y, en 2015, las fuerzas aeroespaciales.
En 2019 el número de trabajadores subcontratados en el ejército superó por primera vez al de soldados y marineros que realizaban el servicio militar obligatorio: 400.000 frente a 267.000 respectivamente.
Shoigu será nombrado secretario del Consejo de Seguridad, en sustitución de Nikolai Patrushev. Al mismo tiempo será el adjunto de Putin en la Comisión de la Industria Militar y dirigirá el trabajo de la Agencia de Cooperación de la Industria Militar, que deja así el Ministerio de Defensa y pasa al Consejo de Seguridad.
Si Belusov parece encargado de llevar la economía a la guerra, a Shoigu le corresponde llevar la guerra a la economía.