La marcha contra los fascistas llevaba por lema «El futuro de Goslar es multicolor. No hay lugar para el racismo», y su objetivo era responder a la de signo neonazi, bautizada como «El día del futuro alemán», en medio de un fuerte dispositivo policial.
La marcha fascista se preparaba desde hace meses y las sucesivas iniciativas impulsadas para lograr su prohibición fracasaron. Finalmente se convocó una contramanifestación, secundada por sindicatos, iglesias, partidos políticos y organizaciones cívicas, que contó entre sus asistentes con el exministro de Exteriores y antiguo dirigente del Partido Socialdemócrata Sigmar Gabriel, vecino de esa pequeña ciudad del estado federado de Baja Sajonia.
La marcha de Goslar sigue a la de signo parecido que tuvo lugar la semana pasada en Berlín, también en contra de una convocatoria de los fascistas de Alternativa para Alemania (AfD) bajo el lema «Por el futuro de Alemania». También en el caso de la capital alemana, la marcha contra el fascismo superó con creces a la de la AfD, que aglutinó a unos 4.000 seguidores, frente a unos 30.000 contramanifestantes.