El jueves la multinacional suiza de la alimentación Nestlé fue acusada formalmente ante los tribunales de California de apoyar deliberadamente la esclavitud y el tráfico de seres humanos entre los marineros de Tailandia que faenan en los buques mariscadores.
En nombre de los compradores de alimentos para los gatos, un abogado presentó el jueves una querella contra Nestlé. En un comunicado de prensa, un abogado que representaba al bufete Hagens Berman dijo que los alimentos para gatos de la marca “Fancy Feast” están producidos con el marisco capturado por marineros que trabajan en condiciones de esclavitud.
Según la querella, a través de un suministrador tailandés, Thai Union Frozen Products Pcl, Nestlé importa más de 12.000 toneladas de alimentos para animales elaborados a base de mariscos que vende luego a grandes marcas comerciales en Estados Unidos. Una parte de esa producción se elabora con mano de obra esclava.
Hombres y adolescentes llegados a Tailandia de los países vecinos más pobres, como Camboya o Birmania, se venden a los armadores de los barcos de pesca, que imponen unas condiciones laborales muy peligrosas para la vida de los trabajadores, así como jornadas de trabajo de 20 horas diarias, pagando salarios irrisorios o absolutamente ninguna cantidad, bajo la amenaza de ser golpeados o incluso asesinados, dice la querella.
“Escondiéndolo al público, Nestlé a conducido de hecho a millones de consumidores a sostener y estimular la esclavitud en esas prisiones flotantes”, ha expuesto Steve Berman, uno de los socios del bufete de abogados que ha presentado la querella en California, en un comunicado en el que invita a los usuarios de las marcas comerciales de Nestlé a sumarse a la denuncia judicial.