Los fondos de inversión radicados en España han aconsejado a sus accionistas mantener la calma y aprovechar este momento para ir revisando sus carteras: la sucesión de quiebras, despidos y endeudamiento que esperan va a ser un chollo para adquirir bienes a precios de ganga.
De ahí que la primera recomendación sea incrementar el nivel de liquidez, tanto para reducir las pérdidas como para aprovechar futuras oportunidades que el mercado pueda ofrecer. Y la mejor manera de tener el patrimonio a buen recaudo son los fondos monetarios. «Se perderá algo de dinero, teniendo en cuenta la inflación, pero ahora lo más importante es reducir los riesgos que se están asumiendo», explica José María Luna, director de inversiones de Luna & Sevilla Asesores Patrimoniales, según publica ElEconomista.
La guerra ha pillado a los gestores con la presentación de resultados de por medio, pero en lo que están de acuerdo todos los responsables consultados es que las caídas han ofrecido una oportunidad para realizar compras en valores considerados de calidad, o dicho de otro modo, la quiebra o el sobreendeudamiento será una oportunidad de oro para que, con paciencia, los grandes activos caigan como fruta madura en manos de estos «inversores».
«Desde la prudencia y la atención máxima en los acontecimientos que se van sucediendo, pensamos que las caídas en bloque del mercado de estos días ofrecen oportunidades en nombres de mucha calidad, con visibilidad de negocio y balances saneados, que merecen la pena ser aprovechadas. Estamos haciendo compras selectivas», comenta Gemma Hurtado, gestora de renta variable de Solventis.
«Nosotros siempre estamos invertidos en torno al 95%, nuestra gestión mira al largo plazo. Hoy tenemos cerca del 15% en petroleras y servicios petrolíferos, que nos está beneficiando, en los fondos de bolsa europeos fruto de la inversión que realizamos en 2020 cuando el petróleo se encontraba por debajo de 40 dólares. Estos bruscos movimientos suelen dar la oportunidad de entrar en compañías de calidad a precios baratos», afirma Mikel Navarro, responsable de renta variable en Santalucía AM.
Las firmas relacionadas con gas y petróleo son uno de los sectores que las firmas de sesgo value ya tenían en cartera, por lo que la subida de las materias primas les ha beneficiado. «Hay bajadas de buenas compañías que son a veces irracionales y que dejan oportunidades en compañías que caen en su cotización sin que los acontecimientos (guerras, Brexit, etc.) tengan relación con su negocio», explica Carlos González Ramos, director de relación con inversores particulares de Cobas AM, quien asegura que no van a reducir sus inversiones, precisamente por la confianza que tienen en que las compañías presentes en sus carteras (energía, fundamentalmente), donde esperan grandes beneficios en el corto plazo.
Duncan Lamont, CFA y responsable de investigación y análisis de Schroders, una de las principales multinacionales británicas de gestión de activos, advierte que «no es difícil imaginar un escenario en el que se mueva aún más alto en los próximos días a medida que los acontecimientos continúan desarrollándose». El riesgo es asumible para las grandes compañías de inversión, que en caso de crisis, pueden soportar el golpe, pero no para las pequeñas y medianas economías, que están mirando al abismo.
No obstante, el analista señala que «a pesar de ser un momento para vender, históricamente, los periodos de mayor volatilidad e incertidumbre han sido cuando los inversores más arriesgados han obtenido mejores rentabilidades». Todos estos actores están pensando en España, un territorio del que esperan obtener auténticas gangas.
Fuente: ElEconomista