Esa postura, no obstante, también provoca todo tipo de suspicacias y sospechas, como cuando el pasado mes de enero hubo el mismo número de militantes que votaron a favor y en contra de apoyar la investidura de un candidato de Junts pel Sí. Ya entonces, Artur Mas infiltró a Mossos d´Esquadra en la CUP para detectar a espías españoles.
Pues bien. Según le cuentan a El Chivato, las sospechas de la coalición han ido a más en los últimos meses. Sobre todo, después de que la CUP haya votado en contra de los Presupuestos de 2016, forzando a JxSí a prorrogar las cuentas del año pasado y dejar en suspenso la aprobación de todas las leyes de desconexión con España.
Estos días, importantes diputados de Junts pel Sí aseguran que en la asamblea en la que se decidió el veto de la CUP al proyecto presupuestario estaban presentes varios agentes del CNI, cuyo objetivo era echar por tierra, definitivamente, el desafío independentista en Cataluña.
Para reunir pruebas que confirmen la denuncia, están recurriendo incluso a militantes de la Candidatura de Unidad Popular, a los que preguntan por “personas desconocidas” presentes en la última gran reunión del partido en la que se decidió votar en contra de los Presupuestos.
De momento, el único que parece haber obtenido éxito en estas pesquisas ha sido Mark Serra, ex de Solidaritat per la Independencia (el partido de Laporta) y ahora en la CUP. La semana pasada compartió con los suyos la siguiente afirmación: “Una persona que conoce bien la CUP me dijo que el otro día sospechó que había gente infiltrada trabajando por España. Yo ya no tengo dudas”.