El jefe de la Policía Local del municipio, Jaume Ramon, se reunió con ellos, tras lo cual decidió dejar en libertad al detenido.
Los manifestantes llegaron a entrar en el Ayuntamiento y para evitar un desenlace grave, y ante la facilitación de datos personales por parte de estos individuos a la fuerza pública, se puso en libertad al detenido a instancia de Jefatura policial.
La decisión de dejarlo en libertad se adoptó sobre las 16.30 horas “para evitar alteraciones graves del orden público por parte de este grupo de vendedores ambulantes en el pueblo de Sant Josep”.
El jefe de la Policía Local restó importancia a lo sucedido. La detención se produjo en la playa de Ses Salines, cuando el senegalés estaba realizando venta ambulante de pareos. Los hechos ocurrieron por la mañana. Un agente intentó darle el alto, pero el senegalés se metió al mar y no quería salir. “¡No! ¡No me da la gana! ¡Venid a por mí si queréis!”, gritó.
Permaneció varios minutos en el agua, pero finalmente accedió a salir. Sin embargo, cuando se encontraba cerca del agente que le iba a detener le lanzó un pareo al rostro y comenzó a huir. Los refuerzos policiales llegaron, pero un grupo de unos 20 vendedores ambulantes intentó que el senegalés no fuera detenido. Finalmente, los policías locales lograron reducirle.