En un ciclo de reuniones las autoridades fiscales americanas del FDIC explicaron a funcionarios de la Unión Europea el modo de clausurar un banco en quiebra en una sola noche. Los contactos se produjeron al dispararse el nerviosismo ante el anuncio del Banco Central Europeo de las pruebas de “estrés” bancario. El Banco Central Europeo considera que varios bancos podrían no sobrevivir a la actual crisis y deberían ser absorbidos por sus competidores, con el riesgo de desatar una quiebra en cadena de todos ellos.
Al más puro estilo militar, en las reuniones ambas partes llevan a cabo simulacros de desmantelamiento rápido de los bancos en quiebra. Los funcionarios de la Unión Europea aprendieron en la práctica las técnicas para cerrar bancos ruinosos en una única noche. Tras una crisis, Estados Unidos puede cerrar de forma inmediata y coordinada casi 500 bancos en una especie de operación de comandos.
Actualmente el Banco Central Europeo está a punto de verificar de nuevo los balances de los grandes bancos de la zona euro. Varias filtraciones indican que algunos de ellos van a ser clasificados en la zona de peligro.
En noviembre el Banco Central Europeo asumirá la competencia de la supervisión bancaria. Para ello ha puesto en marcha un mecanismo único de funcionamiento que comprende, entre otras técnicas, un procedimiento de cierre de los bancos de la zona euro.
Hasta ahora era un aspecto descuidado de la supervisión bancaria en Europa. Un banco en quiebra se puede cerrar de la noche a la mañana. Con motivo de la crisis financiera de Chipre el ministro alemán de Finanzas Wolfgang Schäuble declaró que los depósitos bancarios son materia “sensible” y que en la medida de lo posible las medidas de urgencia se deberían adoptar los fines de semana.
La Asociación Mundial de Riesgos Profesionales (GARP) informa que para estar a punto el día D, los funcionarios de la Unión Europea se han entrenado conjuntamente. Una dirigente del GARP, Pamela Farwig, ha dicho: “Si Usted tiene que decir a alguien que su banco está cerrado, eso lo debe hacer en un lapso de tiempo muy corto”. Según la agencia Bloomberg, en junio la Unión Europea se entrenó en el cierre de bancos. En particular, se trataba de vigilar estrechamente a las pequeñas ciudades para evitar el pánico. En tal caso, un número importante de vehículos desconocidos podrían perturbar el orden público en dichas localidades, dijo Farwig.
A petición de la Comisión Europea la revista alemana Deutsche Wirtschafts Nachirchten ha sido informada de que la Unión Europea y la FDIC trabajan conjuntamente de manera regular dos veces al año, una en Bruselas y otra en Washington. La última de ellas tuvo lugar en Washington en el mes de mayo.
La cooperación con la FDIC adopta la forma de un número pequeño de funcionarios y seminarios especializados, como los que se celebraron el 24 y 25 de junio en Bruselas. En dicho seminario, a petición de la Comisión Europea, la FDIC presentó un supuesto de quiebra de un banco de grandes proporciones. El objetivo era intercambiar experiencias entre ambas partes, en particular dentro del mecanismo de reglamentación bancaria RSM (Resolución Simple del Mecanismo) y de poner en marcha las resoluciones del consejo único de fondos bancarios en crisis.
A finales del pasado año, los ministros de finanzas de la zona euro crearon un nuevo comité, llamado “consejo” que asumirá el cierre de los bancos “zombis”. La eurodiputada Sven Giegold dijo que un monstruo burocrático ejecutando ese plan en un fin de semana daba un imagen de los funcionarios europeos.
Según un comunicado de prensa del Parlamento Europeo, para asegurar que los depositantes recuperen su dinero mucho más rápidamente en caso de quiebra bancaria, la Unión Europea tiene que construir sistemas financiados por la propia banca para compensar los depósitos garantizados. El llamado “bail-in” que se ha puesto en funcionamiento para hacer frente a la crisis bancaria intenta que si un banco está en dificultades sean los principales beneficiarios (accionistas y obligacionistas) los que asuman las responsabilidades.
El caso del salvamento del grupo bancario portugués Banco Espirito Santo (BES) demostró que se trataba de respetar a los contribuyentes europeos.
Hace algunos meses se produjo un pánico bancario en Bulgaria con Corpbank. El gobierno búlgaro dijo entonces que el banco gozaba de buena salud y que el pánico era consecuencia de actividades criminales por internet. Pero desde entonces los clientes no tienen acceso a sus depósitos. Ahora, el banco está a punto de quebrar después de que hace algunas semanas le prometieran una extensión de la línea de crédito de la Unión Europea. Pero aún no está claro en qué medida los contribuyentes europeos perderán su dinero durante una quiebra.
Tampoco está claro que Bulgaria pueda sobrevivir hasta la puesta en funcionamiento del RSM. En tal caso, los demás Estados europeos y sus contribuyentes deberán volver a pagar la factura de gastos.
Por favor, pedidles a los capitalistas que se conviertan al Islam y que a nuestras mujeres e hijas más agraciadas físicamente pero necesitas por estas crisis, las pongan a salvo en harenes.