Desde 1999 las referidas montañas son la base de operaciones del PKK y se encuentran muy próximas a la frontera con Irán, desde la que han tratado de penetrar algunos comandos armados del PJAK, la sucursal del PKK, con muy mala fortuna.
Pero esa no es la única provocación en la que el PKK muestra su carácter servil hacia el imperialismo y el sionismo. Es absolutamente absurdo crear una zona autónoma dentro de otra.
En las montañas de Qandil, que alcanzan los 3.000 metros de altitud, el Mosad adiestra a unos 5.000 kurdos y es bombardeada periódicameente por la aviación turca.
Aprovechando la debilidad de Barzani, el PKK ha organizado en esta región inaccesible una asamblea de 300 delegados para elegir una administración regional.
Ahora no sólo deberán esperar la reacción del gobierno central de Bagdad sino la de sus paisanos irakíes.
La provocación pone de manifiesto las profundas fisuras internas de los diferentes movimientos kurdos, una táctica que los imperialistas manejan sabiamente desde hace décadas.
(*) https://www.iraqinews.com/iraq-war/pkk-declares-new-self-rule-region-northern-iraq/