El artículo aludía a la decisión de Trump de suspender la ayuda militar de la CIA a los “rebeldes sirios” como un regalo a los rusos y a los sirios.
El fracaso, pues, se extiende también a Israel, lo que ha encendido la ira de un diario de los que se pueden considerar como “templados”. Ellos hubieran preferido la victoria de Al-Qaeda o del Califato Islámico.
El diario evoca la desmoralización que se ha extendido entre los yihadistas, tras sentirse abandonados por sus patrocinadores porque la decisión de Washington acarrea la de sus lacayos, es decir, los países del Golfo. Sin esa ayuda los yihadistas no son nada; nunca lo fueron.
Todo comenzó con la derrota en Alepo, dice Haaretz, que inutilizó militarmente a los yihadistas, con los que tampoco cuenta nadie en el terreno político.
Incluso el gobierno de Obama se había dado cuenta de ello. El ataque al aeródromo de Shayraat fue un espejismo; los acontecimientos iban en la dirección opuesta.
“Aunque es verdad que los americanos siguen sosteniendo a los kurdos de Siria frente al Califato Islámico en el norte, no es menos cierto que en el sur son Irán y Rusia los que se encargarán de garantizar la seguridad, instaurar la zona de distensión y, sobre todo, de tomar la iniciativa política”, afirma el diario.
Queda saber lo que harán las monarquías del Golfo con las tropas yihadistas, una vez que Estados Unidos se ha desentendido de ellas. Posiblemente sigan sosteniéndolas, añade Haaretz, a pesar de la deserción de Washington.
Pero esa no es la cuestión fundamental para Israel. Lo que les preocupa a los sionistas es la escalada de la tensión entre Estados Unidos y Turquía. Tanto para el Pentágono como para la OTAN, que un agencia de noticias turca haya publicado los emplazamientos de las bases militares en Rojava es una “traición”.
El creciente rearme de los kurdos con equipos militares muy sofisticados está desatando la reacción de los turcos, cada vez más distantes de Estados Unidos. En Ankara nadie duda de que dichas armas se volverán contra Turquía tarde o temprano y que la pertenencia de Turquía a la OTAN no les otorga ningún beneficio: Estados Unidos ha preferido a los kurdos antes que a sus “socios” de la OTAN.
Pero si a Turquía no le sirve para nada su alianza con Estados Unidos, a los kurdos tampoco. Tarde o temprano los kurdos acabarán por recurrir a Irán o a Rusia, si quieren obtener alguna de sus reivindicaciones, añade Haaretz.
El análisis del fracaso acaba así: en Siria todas las miradas se vuelven hacia Irán y Rusia porque Estados Unidos ha “desertado” del escenario. La iniciativa la tienen esos dos países, tanto en el terreno militar como en el político, concluye el diario israelí.
Es para los que estan en la Otan que a los estados unidos y su govierno cuando quire manda al carajo aquinen qiere cosa estos tomen nota manada de serviles
Genocidas que no se detienen ante nada…tendran su castigo?
USA cuando no le conviene m anda al carajo tratados, pactos o amistades. Asi le paso a Argentina cuando la guerra de las Malvinas.Habiendo un Tratado Interamericano de asistencia Reciproca, que obligaa a los firmantes a prestarse ayuda en caso de agresion a uno de los socios…en este caso USA se alineo con RU Y DEJO MIRANDO LEJOS A LOS ARGENTINOS.