El Consejo de Europa acaba de ponerse en marcha para que los países miembros declaren la guerra a Rusia, ya que están llamados a crear un Tribunal Penal Internacional para investigar los crímenes de Rusia en Ucrania, y sólo ellos. Se trata de vestir con una pátina de legalidad lo que hasta ahora era un aluvión de bloqueos y embargos. También se trata de poner una cara a los malos de la película para seguir alimentando los noticiarios.
Ya lo vimos en Yugoslavia, con una gran diferencia: el Estado fue despedazado, mientras que Rusia sigue en pie. Los tribunales internacionales son creados por los vencedores para juzgar a los vencidos. Se trata, pues, de presentar a Rusia como un país derrotado y vencido.
Por su parte, Rusia hace lo propio y también quiere juzgar los crímenes cometidos por el ejército ucraniano. A un lado y otro de frente los soldados dejarán su sitio a los picapleitos.
Un miembro polaco de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa presentó la petición formalmente. “La Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (APCE) ha hecho un llamamiento a todos los Estados miembros y observadores de la organización para que creen urgentemente un tribunal penal internacional ad hoc, al que se le debe dar un mandato para investigar y procesar el crimen de agresión cometido por los dirigentes políticos y militares de la Federación Rusa”.
En España un tribunal así resultaría anticonstitucional porque no se pueden crear tribunales después de haberse cometido el delito y, desde luego, no se admiten los tribunales “ad hoc”. En consecuencia, lo ilegal no es la guerra sino el tribunal que pretende juzgarla.
Pero la resolución (*) es aún más ridícula porque el cometido de dicho tribunal sería “aplicar la definición del crimen de agresión” establecida por el “derecho internacional consuetudinario”, por lo que no aplicaría ninguna norma previa. Incluso en España tampoco se admitiría nada parecido porque no se admite ningún delito que no esté definido por una ley anterior al hecho.
En fin, quien está violando el derecho internacional es el Consejo de Europa, que pretende facultar al tribunal para “órdenes de detención internacionales sin estar limitado por la inmunidad” de los Jefes de Estado y de Gobierno y otros funcionarios públicos, algo de lo que en España también buenas experiencias con la Corona. Ningún juez español ha sido capaz de juzgar al Jefe del Estado español y ahora pretenden hacernos tragar con un Jefe de Estado extranjero.
Es absolutamente delirante de principio a fin. Estados Unidos ya ha dicho que no participará en semejante farsa porque no admite la jurisdicción del Tribunal Penal Internacional, lo mismo que Rusia.
Con este tipo de montajes va a ocurrir lo mismo que con las sanciones. En un caso se fractura el mercado internacional y en el otro se acabará con la cooperación jurídica internacional. Cuando alguien cometa un delito en un país europeo, no habrá nada mejor que refugiarse en Rusia, que dejará de tramitar las extradiciones. Si los criminales rusos encuentran asilo en Londres, donde reciben el tratamiento de exiliados políticos, lo mismo harán los rusos con los británicos.
(*) https://www.coe.int/fr/web/portal/-/pace-calls-for-an-ad-hoc-international-criminal-tribunal-to-investigate-war-crimes-in-ukraine