En una conferencia en línea, el martes la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, estimó que casi una cuarta parte de los países emergentes se enfrenta a dificultades relacionadas con la deuda. El 25 por cien está “en problemas o cerca de ellos debido a su deuda”.
Es más pesimista respecto a los países de bajos ingresos, pues estima que “más del 60 por cien ya está en dificultades, lo que supone un nivel significativo y preocupante”.
La situación se ha complicado desde el inicio de la Guerra de Ucrania, ya que “16 países han presentado solicitudes de ayuda financiera por un total de unos 90.000 millones de dólares” en los últimos seis meses.
El FMI ha tenido que acudir en ayuda de varios países con dificultades de financiación en los mercados, como Sri Lanka, Túnez, Pakistán y Argentina.
Entre las últimas ayudas concedidas, el FMI entregó a principios de este mes 1.300 millones de dólares a Zambia, que se encuentra en situación de impago desde finales de 2020 con una deuda externa estimada en 17.300 millones de dólares.