La tasa de mortalidad ha pasado de ser superior a ser inferior a la de años anteriores, lo cual no es ninguna sorpresa, como reconoce el propio artículo. Se llama “efecto cosecha” y el motivo es que la distribución de las muertes no es regular al cabo de un mismo año.
En 2007 un estudio del INE sobre la campaña de gripe de los dos años antes concluyó que “las defunciones de la población más vulnerable (como ancianos y enfermos crónicos) se acumulan en un corto periodo de tiempo cuando hay algún factor externo extraordinario, en este caso, una gripe agresiva” (2).
Para saber si realmente se ha producido una epidemia causada por una determinada enfermedad son necesarias dos circunstancias. La primera es cuantitativa: el número de muertos superior al de años anteriores por el mismo concepto, y la segunda es cualitativa: la causa de dichos fallecimientos debe estar en la enfermedad, para lo cual se debieron practicar autopsias.
Como la pandemia ha sido de carácter mundial, esas circunstancias se deben reproducir, además, en varios países del mundo.
Si se ocultan las causas de la muerte, como ha ocurrido en España a lo largo de la campaña de histeria, dicha información no existe y en tal caso hay que recurrir a un medio indirecto, que es un número de muertos superior al de años anteriores por todos los conceptos.
Es un baremo que no es tan fácil de establecer porque, como todo fenómeno cuantitativo, depende de la vara de medir y, más en concreto, del periodo de tiempo dentro del cual se computan los muertos.
Hay quien hace el recuento en el pico de la epidemia, como si el “efecto cosecha” no existiera. En tal caso no cabe duda que en España ha habido un exceso de mortalidad muy importante, cuyas causas sería muy interesante discutir, porque habría que buscarlas -en todo caso- en el estado de alarma y no en ninguna enfermedad.
Pero si el recuento de muertos se lleva a cabo al término de un año, al ritmo actual lo más probable es que no aparezca ningún exceso de mortalidad.
Desde luego que el número de muertos, cualquiera que resulte, ni explica ni justifica el estado de alarma, y mucho menos las medidas que siguen en vigor tras su finalización nominal.
Unas medidas extraordinarias, como las que han impuesto, sólo se pueden justificar por causas igualmente extraordinarias
(1) https://www.elconfidencial.com/espana/2020-07-02/covid19-mortalidad-coronavirus-muertes_2664632/
(2) https://www.20minutos.es/noticia/236507/0/gripe/convirtio/muertes/