El poder es control político, que se ejerce sobre las personas y también sobre las cosas, como forma de controlar a las personas. Dicho control es cada vez más estricto y se impone con una batería de pretextos cada vez más amplia, que van desde la identidad hasta la sanidad.
Ciertos países, como Kuwait, sirven de conejillos de Indias para ensayar las nuevas formas de control social. El país del Golfo acaba de implementar un registro biométrico para todos sus ciudadanos y residentes que viven en su territorio. Quien llegue tarde corre el riesgo de que le congelen su cuenta bancaria y le suspendan su documento de identidad. En otras palabras, puede quedar socialmente incapacitado.
El gobierno kuwaití tiene una forma muy cruda de alentar a las personas eque viven en su país a cumplir con sus mandatos. Todos los kuwaitíes han debido someterse al registro biométrico antes del 1 de octubre y todos los residentes deberán hacerlo antes del 31 de diciembre. En caso contrario, se exponen a sanciones bancarias y administrativas.
El sistema de registro biométrico comenzó a implementarse en Kuwait en mayo del año pasado. Inicialmente solo afectaba a los viajeros que llegaban al país: ciudadanos y residentes que regresaban o visitantes extranjeros. A partir del 1 de marzo se amplió a toda la población adulta, fijándose como fecha límite el 1 de junio, aunque luego se retrasó.
“El Estado se ha comprometido a recopilar datos biométricos para abordar cuestiones relacionadas con la doble nacionalidad y fortalecer las medidas de seguridad. Además, detectará automáticamente a personas que utilicen pasaportes fraudulentos para ingresar en el país”, explica Biometric Update (1).
Según Gulf News, el gobierno kuwaití tiene intención de colaborar con terceros, incluida la Interpol y los países del Consejo de Cooperación del Golfo (del que Kuwait forma parte junto con Arabia saudí, Omán, Qatar, Emiratos Árabes Unidos y Bahrein), para establecer un red de seguridad (2).
El castigo es la primera consecuencia de la desobediencia. “El incumplimiento de esta medida de seguridad dará lugar a restricciones de determinados servicios ministeriales, incluida la renovación de los permisos de residencia y de los permisos de viaje”, afirma Biometric Update.
Pero las personas son desobedientes a este tipo de controles. A principios de septiembre 175.000 ciudadanos y 800.000 residentes aún no habían registrado sus datos biométricos. A medida que se acercaba la fecha límite para los ciudadanos, el gobierno decidió utilizar amenazas adicionales para obligar a los recién llegados y recalcitrantes a pasar por el aro.
“Quienes no cumplan con los plazos de registro biométrico serán suspendidos de los servicios públicos. El Banco Central del país también planea implementar restricciones graduales en las cuentas bancarias de las personas que no cumplan con los requisitos de registro de datos biométricos”, advierte Biometric Update.
El Banco Central de Kuwait ordenó a los bancos que cumplan la decisión ministerial, según el periódico Times Kuwait, que especifica las cuatro etapas del sistema de control. En primer lugar, el envío de un mensaje de alerta a todos los clientes recalcitrantes antes del 30 de septiembre, seguido del cierre de todos los canales electrónicos (acceso a cuentas en línea y transferencias en línea) a partir del 1 de octubre, luego la desactivación de las tarjetas bancarias y, finalmente, la congelación total de las cuentas corrientes (3).
Times Kuwait también señala que “las restricciones bancarias no se limitarían únicamente a los saldos. La prohibición se extenderá a todas las cuentas mantenidas por los clientes en los mercados financieros, incluidas acciones, fondos, carteras y otros activos administrados por terceros, ya sea en el sector público o en el privado. Eso significa que todos los fondos provenientes de la venta de acciones, bienes raíces u otras transacciones comerciales se transferirán a cuentas congeladas por el banco”.
En cambio, “los pagos adeudados por los clientes seguirán deduciéndose durante el período restringido para pagar a los acreedores, incluidos los prestamistas y la hacienda pública”.
El 30 de septiembre, fecha límite de registro para los ciudadanos, Arab Times Kuwait informó que casi 60.000 kuwaitíes aún no habían completado su registro biométrico. A partir del 1 de octubre fueron bloqueados sus canales electrónicos y sistemas de pago en línea. Desde el 15 de octubre, las tarjetas bancarias de quienes aún no se han sometido están desactivadas, obligándolos a acudir a una sucursal para retirar dinero. A partir del 1 de noviembre sus cuentas serán completamente inaccesibles (4).
Además de las sanciones bancarias y administrativas, incluida la retirada de su documento de identidad tradicional, los reacios también corren el riesgo de ser objeto de una investigación destinada a determinar las razones por las que se niegan a obedecer.
A principios de octubre el Departamento General de Seguridad informó que un ciudadano kuwaití abandonó voluntariamente el Aeropuerto Internacional de Kuwait, después de negarse a completar su registro biométrico, que es obligatorio para ingresar en el país.
(1) https://www.biometricupdate.com/202403/kuwait-to-share-biometrics-with-interpol-gulf-countries-for-regional-security-network
(2) https://gulfnews.com/world/gulf/kuwait/unified-gcc-biometric-fingerprint-linkage-under-way-1.101830662
(3) https://timeskuwait.com/banks-ready-for-biometric-fingerprint-deadline-account-restrictions-loom/
(4) https://www.arabtimesonline.com/news/urgent-biometric-fingerprint-centers-open-until-midnight-today-to-meet-final-deadline/