La empresa rusa de seguridad informática Kaspersky afirma que, sin embargo, aún quedan interrogantes acerca de la manera que el espionaje israeleí instaló los troyanos así como el volumen de información que han logrado interceptar. No obstante, parece casi seguro que lograron controlar los ordenadores por medio de lo que se conoce como “rootkits”, así como los móviles, los ascensores y las alarmas.
Según el Wall Street Journal, los israelíes tomaron el control del sistema informático de los hoteles antes de incluso de empezar las conversaciones. El diario económico de Nueva York asegura que desde marzo Estados Unidos estaba al corriente de que las negociaciones estaban siendo interceptadas por los israelíes y transmitidas a Netanyahu.
El ministro adjunto de Defensa israelí Eli Ben-Dahan ha desmentido categóricamente la información. Ha calificado la posibilidad de que Israel captara la señal wifi de los hoteles como un “sin-sentido”.
Sin embargo, la Fiscalía suiza ha abierto una investigación criminal para esclarecer el espionaje. El 12 de mayo en Ginebra la policía llevó a cabo varios registros e incautaron diverso material informático.