A veces los gobiernos arremeten contra las multinacionales farmacéuticas, cuando sus prácticas corruptas resultan insostenibles. Los tribunales estadounidenses multaron a Pfizer con 75 millones de dólares y en 2020 a la suiza Novartis con 678 millones de dólares.
Ahora es el turno de Grecia. Para inflar los precios de los medicamentos, las multinacionales farmacéuticas sobornan a los médicos y a las instituciones sanitarias. Pero tan corrupto es quien da el dinero, como quien lo recibe.
La información apareció el pasado mes de junio y, como es natural, fue silenciada por los medios de comunicación convencionales. Según el OCCRP, un consorcio de periodistas de investigación especializados en corrupción y crimen organizado, el gobierno griego reclama 225 millones de dólares (214 millones de euros) a la farmacéutica suiza Novartis por corrupción y pago de sobornos.
La denuncia fue confirmada por un comunicado del Ministerio de Sanidad griego, que aún está disponible en la web oficial del Ministerio: “Hoy el gobierno griego ha presentado una demanda contra Novartis reclamando la suma de 214 millones de euros en concepto de daños y perjuicios por el perjuicio moral sufrido por el gobierno griego en prácticas reconocidas por el propio laboratorio y relacionadas con la financiación de los médicos”.
El comunicado de prensa no proporciona más información sobre las acusaciones contra la multinacional. Sin embargo, según el consorcio OCCRP, el escándalo de Novartis estalló en 2016 e involucra a ministros y primeros ministros, todos ellos sospechosos de haber recibido decenas de millones de euros de la empresa farmacéutica para inflar los precios de sus medicamentos. “Esta práctica ha repercutido en los precios de los medicamentos en Europa y en el resto del mundo”, señala el OCCRP.
Según los periodistas, que citan a Dimitris Papangelopoulos, el segundo al mando en el Ministerio de Justicia griego, es el mayor escándalo desde el surgimiento del Estado griego. Las pérdidas de esta enorme estafa que sufrió Grecia se estiman en unos 3.000 millones de dólares.
La denuncia se interpuso justo dos años después de que Novartis admitiera haber pagado sobornos a las autoridades sanitarias griegas. La multinacional fue declarada culpable y multada con 347 millones de dólares en Estados Unidos.
No es la primera vez que la farmacéutica suiza es sorprendida en un fraude. En 2020 fue condenada por los tribunales estadounidenses a pagar 678 millones de dólares por haber sobornado a médicos para que hicieran publicidad de sus medicamentos a los pacientes.
En julio el gobierno británico multó a Pfizer con 75 millones de dólares por defraudar al Estado inflando excesivamente el precio de un medicamento contra la epilepsia.
—https://www.consalud.es/ecsalud/internacional/novartis-demandada-por-soborno-en-grecia_116675_102.html